■ Es una acción muy común, afirma Ramírez Bucio; César Flemate niega esa posibilidad
■ “No lo sé de cierto, pero se habla de gente de todos los partidos”: David Monreal Ávila
Hay versiones encontradas respecto de las presuntas mochadas que piden algunos diputados federales para etiquetar recursos a favor del estado o municipio que les pague, según se ha denunciado a la opinión pública recientemente y se involucra directamente a los coordinadores de las bancadas del PRI, PAN y PRD y otros más.
Mientras que el legislador federal priísta, Julio César Flemate, negó la posibilidad, el senador del PT, David Monreal Ávila, dijo que si bien no tiene pruebas, es muy probable; el ex diputado panista, Arturo Ramírez Bucio, aseveró que es una práctica muy común y el coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano en la Cámara Baja, Ricardo Monreal Ávila, habló de una investigación que realiza para evidenciar con pruebas las acusaciones hechas en contra de algunos representantes populares.
El ex gobernador de Zacatecas, Ricardo Monreal, dijo en entrevista no tener la certeza de que se den esos actos de corrupción en el Congreso de la Unión, sin embargo el asunto no se debe tratar con frivolidad ni tampoco usarse como un instrumento de acusación, por lo cual es conveniente investigar si esas prácticas existen.
De modo que informó, hará el planteamiento en la Junta de Coordinación Política de crear una comisión especial para investigar el tema y de esa manera limpiar el Congreso, porque es importante tener autoridad moral y no responsa actos de corrupción, ya que de por sí la política está deteriorada.
Él en lo particular, aseguró que nunca le ha hecho un ofrecimiento algún gobernador o alcaldes, “nosotros somos oposición y hemos rechazado todas las reformas lesivas y tampoco avalamos cómo se repartieron el presupuesto y la deuda que se adquirió”.
Por su parte, el ex legislador federal del PAN, Arturo Ramírez Bucio, explicó que cada año se busca incrementar el presupuesto de la Federación al subir la previsión que tendrá el costo de barril del petróleo, excedente que va a una bolsa común, la otra forma es la paridad del peso frente al dólar y la tercera es el déficit presupuestal, rubros en los que se juntan entre 120 mil y 150 mil millones de pesos.
Dinero con el cual se apoya a estados y municipios a partir de proyectos y es justo ese fondo el que permite a muchos diputados pedir mochada para jalar recursos a determinada región.
“Hay quienes piden el diezmo o más y otros ya de plano hacen su propia constructora para que le den obra pública, si se le da seguimiento se va a encontrar que algunos actuales tienen negocios que les dan servicios a los gobiernos de los diferentes niveles”, expuso.
No sólo en el Congreso, también en los cabildos, refirió que por ejemplo el diputado local panista, Luis Acosta Jaime, fue regidor en Fresnillo y siendo edil fue proveedor del ayuntamiento y le dieron obra pública a su empresa Materiales Acosta, con lo cual violentó la ley, dijo, al asegurar que hay documentos probatorios.
Ramírez Bucio consideró que son grados de corrupción difíciles de detectar, pero son una realidad. Como también lo es el que los diputados prioricen sobre los otros dar obras para los municipios o estados que gobierna su partido.
Él en su momento apoyó a los presidentes municipales de Huanusco, Tlaltenango, Cañitas de Felipe Pescador y otros de gobierno panista, aunque dijo, nunca pidió diezmo.
Julio César Flemate, diputado federal del PRI, aseguró no tener información de que algún legislador de su partido haya recibido algún porcentaje por etiquetar recursos y desconoció si ha sucedido con los de otro partido.
Aseveró que a él en lo particular no le han hecho un planteamiento de ese tipo, porque para bajar recursos a Zacatecas sólo se necesita tener proyectos de Gobierno estatal o los municipios, de modo que nunca pasa por las manos de los diputados recurso alguno, “únicamente nosotros vemos el presupuesto en el papel”, comentó.
De ser así, se pronunció porque se pongan las demandas necesarias, porque de ser ciertas las acusaciones son acciones reprobables e inadmisibles para el Legislativo.
Finalmente, el senador petista, David Monreal, dijo haber escuchado que son ciertos los “famosos moches”, incluso lo dan por cierto algunos diputados, práctica delicada que debe ser atendida, porque en el afán de lograr presupuestos unitarios, sin oposición muchos alimentan ese tipo de corrupciones.
Aunque no sólo es un asunto del legislador, sino también de quienes aceptan ese tipo de corrupción. Monreal desconoció si en Zacatecas se ha incurrido en algo así, “no lo sé de cierto, pero se habla de gente de todos los partidos, pero hubo quienes no lo consintieron y no aceptaron”.
