■ Fue hallada un arma de fuego; las autoridades afirman que la situación está bajo control
■ Uno de los heridos fue excarcelado para su traslado a recibir atención médica
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado de Zacatecas informó que, durante la madrugada de este viernes, se registró un motín al interior del Centro Regional de Reinserción Social (Cerereso) Varonil de Cieneguillas, con resultado de un interno fallecido y seis más lesionados.
Uno de los heridos fue excarcelado para su traslado a recibir atención médica, ya que presentaba una lesión en una pierna. Dicha lesión, al igual que la del interno que perdió la vida, están en análisis para determinar bajo qué condiciones fueron hechas y qué las produjo.
Tras reportarse el motín al interior del centro penitenciario en los módulos 1, 2 y 3 del área de sentenciados, se activaron los protocolos de actuación en los que participan Policía Penitenciaria, Policía Estatal y Metropol y se cuenta con apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional y la Policía de Investigación al interior.
Asimismo, en el resguardo perimetral, se cuenta con apoyo de Policía de Investigación, Policía Municipal y autoridades federales.
Al ser hallada al menos un arma de fuego y aunque hasta el momento la situación al interior fue controlada, se evalúa y mantiene presencia para proceder con revisiones al interior; de igual forma, se está en espera de que el personal pericial ingrese para realizar los dictámenes correspondientes.
Las autoridades no dieron mayor información al respecto; al ser cuestionadas únicamente agregaron que “hasta el momento todo sigue igual”.
Estos sucesos se dan a poco más de un año de que, en el mismo establecimiento penitenciario, el 31 de diciembre 2019 por la tarde, durante una riña fallecieron 16 internos y 20 más resultaron heridos, debido a una rivalidad entre dos grupos delictivos, informó el entonces secretario de Seguridad Pública, Ismael Camberos Hernández.
El 6 de mayo de 2020, 12 internos evadieron la seguridad del penal y se dieron a la fuga a través de un túnel de 50 metros de largo desde el dormitorio 1 del anexo 1. Se calcula que la construcción de dicho túnel llevó entre 6 y 8 meses.
En ese entonces se registraron detonaciones de arma fuego desde una de las torres del penal para advertir sobre la fuga de los reclusos, quienes escaparon en tres autos diferentes.
