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viernes, 29 marzo, 2024
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De la oscuridad a la luz

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Por: ALBERTO VÉLEZ RODRÍGUEZ • ROLANDO ALVARADO •

En el caminar de los dioses de la oscuridad a la luz se hizo el mundo, en ese peregrinar hacia la tierra del peyote algunos de ellos se quedaron en el camino convertidos en arroyos, piedras, cerros, árboles, entidades sagradas todas. Uno de ellos es Makwipa, el denominado Cerro del Padre, concebido por los huicholes, aparte de como un Dios, como una puerta de acceso a Wirikuta. Por tanto, es un lugar de gran importancia sagrada en el que los huicholes deben dejar ofrendas, principalmente jícaras y flechas rituales. María Fernanda Paz Salinas (Acta Sociológica, 73 (2017) p. 197-219) menciona que entre 2009 y 2013 acontecieron 160 casos de sobreexplotación, despojo, contaminación, deterioro y destrucción ambiental causados por las empresas capitalistas, lo que nos indica que la invasión de lugares sagrados y propiedades de los pueblos originarios es un punto muy conflictivo en el México actual. De estos 34 se clasifican como luchas en defensa del territorio ante el avance de proyectos de construcción de carreteras, minas, pozos petroleros, presas hidroeléctricas y parques eólicos. En un comunicado aparecido en octubre 14 del 2016 titulado “Que retiemble en sus centros la tierra”, el EZLN declaró: “En nuestros pueblos nos construimos cada día en las resistencias por detener la tempestad y ofensiva capitalista que no cesa sino que se vuelve cada día más agresiva y se ha convertido en una amenaza civilizatoria no sólo para los pueblos indígenas y campesinos sino para los pueblos de las ciudades que deben también crear formas dignas y rebeldes para no ser asesinados, despojados, contaminados, enfermados, esclavizados, secuestrados o desaparecidos”. De ahí surgió el Consejo Indígena de Gobierno y la aspirante a una candidatura a la presidencia de la república María de Jesús Patricio Martínez. Esta es la contraofensiva de los pueblos originarios contra las concesiones del gobierno, apreciándose que tratan de inmiscuir a toda la población articulando un discurso que la incluya. No es una lucha por sólo la propiedad comunal indígena. Aquí nos interesa narrar la complejidad de una situación que nos atañe a todos como zacatecanos. Como se informó en “La Jornada” (5/sept/13) el México Power Group tenía interés en construir un parque eólico en Zacatecas para surtir de electricidad plantas de la Volkswagen en Puebla y Guanajuato, sin embargo, para tratar de evitar los problemas con los huicholes porque, como ya se mencionó el Cerro del Padre es uno de sus muchos dioses, los ejecutivos de la compañía capitalista tenían varios frentes de negociación. Por un lado, debían determinar si los terrenos en los que se llevarían a cabo las obras se empalmaban con la ruta sagrada huichola, debían rentar los terrenos a dueños y ejidatarios (uno de los dueños es Jesús Octavio Enríquez), contar con la anuencia del Gobierno del Estado y, finalmente, entrevistarse con las autoridades del pueblo huichol. John Prock, alto ejecutivo de la compañía, se puso en contacto con autoridades de la UAZ, quienes llamarón al antropólogo Dr. Leobardo Villegas Mariscal para que realizara la investigación acerca de los lugares sagrados. Le recomendaron que cobrara el trabajo y la compañía pagó 90,000 pesos por la investigación. Entretanto se transportó, desde lo más recóndito de la sierra que habitan, en avión y avioneta, a las autoridades de los cinco principales pueblos huicholes hasta el punto donde se realizarían las obras. Se les hospedó en los mejores hoteles mientras verificaban si había invasión o no de sus lugares sagrados en Zacatecas. Una vez que corroboraron que no había invasión, firmaron con Prock un acuerdo con la promesa de construirles un templo ceremonial y un lugar de descanso en el Cerro del Padre o aledaña región. Promesa que después de tres años no ha sido cumplida. Los ejidatarios y dueños obtuvieron una renta, mientras que permanece en el misterio lo ganado por los gobernantes. Todos los involucrados parecen haber negociado en su propio beneficio quedando la cuestión: ¿Qué beneficios ha traído el parque eólico para el ciudadano común de Zacatecas? Mientras los ciudadanos permanezcan desorganizados e ignorantes de su entorno perderán incluso lo que tienen. Sería recomendable cuestionar la ilusión indigenista que tergiversa, de manera grotesca, la imagen del mundo indígena, al anteponer sus esperanzas y alucinaciones a la realidad en que se desenvuelve, que es de una mayor complejidad que la simple contraposición entre un mundo bueno y armonioso y otro depredador y caótico. Y es que los indígenas, como refiere el antropólogo ya aludido, tienen muchas formas de interactuar en el mundo capitalista, adoptando una postura “chamanica” que les lleva a desempeñar distintos papeles en contextos cambiantes y contradictorios, desde el trabajo asalariado hasta desempeñar funciones (guías espirituales, curanderos…) que satisfagan las fantasías de los indigenistas, que hacen de ellos lo que ellos la imagen de lo que quisieran ser. Y es que después de todo, diluir la fantasía indigenista implica abrirse realmente a la realidad de las sociedades indígenas, las que no escapan de tener sus propias contradicciones, defectos y problemas, pero una vez en este punto podremos tener una verdadera apreciación de sus culturas ajena a toda ingenuidad. Ver los defectos de la sociedad indígena nos permitirá ver las auténticas virtudes que tienen.

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