■ Presentan el libro La Revolución en Zacatecas y la batalla de 1914, de Oliverio Sarmiento
■ Le compete ser un dinamizador transversal de los organismos públicos: directora del AGN
Mercedes de Vega Armijo, directora del Archivo General de la Nación (AGN), afirmó que los archivos en los estados no deben limitarse a organizar o conservar documentos históricos, sino también a coadyuvar en la gobernanza y facilitar la transparencia y el acceso a la información.
Durante la presentación del libro La Revolución en Zacatecas y la batalla de 1914, de Oliverio Sarmiento Pacheco, la invitada especial explicó que el ser y el quehacer del archivo hoy no se limita a planear, a dirigir, a controlar la producción, circulación, organización, conservación, uso y destino final de los documentos con que cuenta, sino a responsabilizarse sobre todos los archivos de trámite o administrativos que se generan en el Poder Ejecutivo.
“Entonces al archivo le compete ser un dinamizador transversal de los organismos públicos y propiciar una relación más fluida de estos con la sociedad para un mayor sustento de la que hoy son valores fundamentales de la gobernanza: la transparencia, la rendición de cuentas, el acceso a la información y la protección de datos personales”, expuso.
Indicó que el Estado es el que posee el mayor número de datos de la ciudadanía, motivo por el cual los archivos están obligados a tener un papel fundamental. En ese sentido, el AGN, como rector de la archivística en México y con sólidos mecanismos de preservación, ordenamiento y resguardo de los acervos del Poder Ejecutivo Federal, tiene la visión de preservar, difundir e incrementar el patrimonio documental del país.
De Vega Armijo comentó que los archivos en la mayor parte de México están “tirados en el suelo”, y aunque levantarlos llevará varias décadas, la presentación del libro La Revolución en Zacatecas y la batalla de 1914 demuestra que es posible, y que a pesar de tener archivos con nivel alto de destrucción, se pueden rescatar.
Manifestó entonces la necesidad de ampliar la cultura archivística a nivel nacional, y así como las personas resguardan sus documentos celosamente, de igual manera se deben guardar los documentos de la nación y para ello hay qué promover en el ciudadano una conciencia sobre el patrimonio documental.
“Basta que me asome a ver las cajas, los papeles amontonados aquí y allá para darme cuenta que la riqueza patrimonial y documental de este país es infinita. Por otro lado, tengo pesimismo porque cuestiono cuándo vamos a levantar todo eso, ¿cuándo vamos a poner en orden esta memoria que nos han legado nuestros antecesores?”.
Se refirió a la Ley General de Archivos y aseguró que esa normatividad dará homogeneidad y organización a los Archivos en los ámbitos federal, estatal y municipal, y será determinante en la construcción de un sistema nacional articulado de rendición de cuentas y mecanismos de coordinación entre todos los niveles de gobierno.
De Vega Armijo señaló además que esa ley pugna por un federalismo archivístico mediante el cual se respete la soberanía de los estados y la independencia de los tres poderes a nivel local y federal.
El libro fue comentado por Eleuterio Ramos Leal, presidente municipal de Valparaíso, lugar donde el autor del libro funge como cronista, así como por la historiadora Xóchitl del Carmen Marentes Esquivel.