■ “La entidad necesita un cambio, y para ello no se requieren mesías ni caudillos”
■ Sobre destapes, pide a priístas y externos no calentar la maquinaria más de lo necesario
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) insiste en que para 2016 podría hacer alianzas electorales con cualquier partido, menos con aquel donde militen los hermanos Monreal, sentenció el presidente estatal del tricolor, José Marco Antonio Olvera Acevedo.
Se pronunció en entrevista porque la familia Monreal “ya deje en paz a Zacatecas”, de lo contrario “¿qué vamos a hacer cuando se nos mueran los Monreal?”, se preguntó si querrán seguir en la política los hijos, nietos y bisnietos.
A decir de José Olvera, Zacatecas merece respeto, porque si bien el ex gobernador Ricardo Monreal Ávila será jefe delegacional en el Distrito Federal, consideró que quizás allá haga buen papel, pero le pidió que ya “dejen en paz” a este estado.
En el ámbito de la elección local que iniciará formalmente el 7 de septiembre, el líder priísta opinó que la entidad “necesita un cambio”, y para ello no se requieren mesías ni caudillos, porque eso se superó en el tiempo de Plutarco Elías Calles. Urgen zacatecanos que quieran y se entreguen a su tierra, pero hay gente retrasada en el tiempo, cuestionó.
Tras polémicos comentarios e información difundidos esta semana sobre posibles alianzas entre el PRD y PRI, así como los destapes de algunos priístas, Olvera Acevedo pidió a tricolores y externos a no calentar la maquinaria más de lo necesario, porque no por mucho madrugar amanece más temprano.
Insistió en que si para lograr el cometido de ganar la gubernatura una vez más es necesario hacer alianzas, el PRI las va a hacer y reiteró que podrían ser con el PRD y PAN, cada uno respetando sus doctrinas pero que la candidatura sea encabezada por un priísta. Aunque evitó decir si ya hubo acercamientos con las dirigencias.
Olvera además se pronunció por entender que los gobiernos aún no terminan, por ende debe haber mesura y responsabilidad para no distraer la atención hacia los intereses de una campaña y dejar de lado el quehacer gubernamental.
“Hay que dejar que tanto el señor gobernador como los alcaldes sigan trabajando y no distraigan con ese tipo de cosas”, finalizó.
