Solamente los sabios son capaces de condensar la memoria de casi 90 años en un libro de un poco más de 76 páginas. Bastan pocas palabras que evocan sabores, sonidos, olores, imágenes en sepia, amistades, amores y paternidades para lograrlo; pero sólo los sabios tienen la capacidad de síntesis para hacerlo, y más en forma de poesía, y Veremundo Carrillo Trujillo es uno de esos.
Vida aquí nacida (Texere, 2023) se titula el nuevo libro de uno de los decanos de la poesía Zacatecana, Veremundo Carrillo Trujillo, un libro que, a decir de su autor, abarca un periodo de casi 90 años: desde “la límpida infancia” y “la divertida adolescencia” entre las que se cuelan “relámpagos de sentimiento, tedio o desencanto” hasta los testimonios más recientes, segmentados en versos que, si bien, “no tendrán talento” sí “imborrables recuerdos”.
El auditorio del Museo de Arte Abstracto “Manuel Felguérez” fue la sede que albergó el lanzamiento del nuevo poemario de Carrillo Trujillo y desde donde confesó que soñó con ser dulcero o panadero, e intentó ser matemático, filósofo y teólogo, pero que al final se quedó con el consejo que les daba a sus alumnos: “quizá no llegues a ser un deportista sobresaliente, un gran escritor, un venerable sabio; pero sé un hombre o una mujer grande”.
Confiesa autor que
soñó con ser dulcero
o panadero, e intentó
ser matemático,
filósofo y teólogo
Con respecto a su libro, el autor de Máscaras de piel de hombre, dijo que “más de uno dirá: ‘incoherencias de un loco’, pero sonreiré y cantaré susurrando, ‘cuéntame vida, si valió la pena’” pues disfrutar el día ha sido su credo vital y estético; en ese sentido, quien se asome a Vida aquí nacida, vivirá lo que su autor vivió, dijo el nacido en Achimec de Arriba, hoy San Pascual, municipio de Tepetongo.
Al autor lo acompañaron en los comentarios, Elodia Bañuelos de Santiago, amiga entrañable de Carrillo Trujillo, y para quien la poesía se encuentra desde la propia dedicatoria del libro, y el escritor Alejandro García, para quien Vida aquí nacida es un poemario armando en plena lucidez del “orfebre de la palabra” en torno a un núcleo, la vida, pero que, a diferencia de una poesía anacrónica que se somete al pasado, la de Veremundo Carrillo trae al mundo actual un vocabulario y una realidad desconocida para muchos.
El libro está dividido en ocho partes, entre las que destacan “Bucólicas Kai Ta Loipa”, un cúmulo de lo que pudieran parecer arcaísmos que al leerlos despiertan todos los sentidos; “Yo y mi circunstancia”, que incluye el poema “Nuestros muchachos”, que lamenta el clima de violencia; “East or west, home is best”, con claras referencias a su núcleo familiar, y “Puntadas”, que condensan la esencia humorística del hijo pródigo de Achimec.