■ Según Inegi, cada año se registran 2 mil nacimientos en mujeres de entre 10 y 17 años de edad
■ 32% de los jóvenes en la entidad inició su vida sexual antes de los 19 años: Encuesta de Salud
De acuerdo con el más reciente Censo de Población y Vivienda (2010), 2 mil nacimientos que se registran en Zacatecas cada año, ocurren en mujeres entre 10 y 17 años de edad (6.8 por ciento del total de la tasa de natalidad anual, frente a 7.0 por ciento a escala nacional), de las cuales 46.8 por ciento de las madres adolescentes no han concluido su educación básica.
Asimismo, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, una tercera parte de los adolescentes de Zacatecas (32.0 por ciento) había iniciado su vida sexual antes de los 19 años. Esta fuente señala que 81.7 por ciento de los adolescentes zacatecanos conoce o ha oído hablar de algún método para evitar el embarazo o para no tener hijos, sin embargo, sólo 25.0 por ciento de las mujeres señalaron el uso del preservativo en su primera relación sexual, frente a 87.7 por ciento de los hombres.
Asimismo, según información del área de Salud Reproductiva de los Servicios de Salud de Zacatecas, en cinco años los eventos obstétricos en adolescentes, es decir partos y abortos, se incrementaron en el estado de 3 mil 751, a 4 mil 760.
El común denominador para el incremento de embarazos en adolescentes, señala la Organización para el Desarrollo Social y la Educación para Todos (Odisea), es la desinformación o deficiencias en la enseñanza de la sexualidad, así como la falta de fomento del uso adecuado de los anticonceptivos.
El principal problema que traen consigo estas cifras, entonces, es el alto riesgo obstétrico para las adolescentes: mayor incidencia de anemia, infecciones, partos prematuros y cesáreas y, en los recién nacidos, bajo peso en el alumbramiento y mayores dificultades para crecer sanos.
Además de estos riesgos, la falta de educación sexual y reproductiva redunda en mayor riesgo de adquirir enfermedades de trasmisión sexual, como VIH o Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), sífilis y el virus del papiloma humano.
Para atender esa situación, Luis Alberto Barquera Medina, presidente de Odisea, sugirió la creación de programas específicos para su aplicación y supervisión adecuada, así como el fortalecimiento y financiamiento suficiente para la atención y rehabilitación de adolescentes sujetos a internamiento, atendiendo a estándares internacionales y a un enfoque de derechos.
Por último, señaló la importancia de proteger a niños y adolescentes de Zacatecas contra la violencia en la familia, la escuela y la comunidad, ya que un entorno de violencia, condiciones de pobreza y trabajo infantil, uniones tempranas, consumo de drogas y alcohol, exclusión escolar y un ambiente hostil en la escuela, así como la violencia en la propia familia, constituyen factores de riesgo y violaciones de derechos que están impactando negativamente en la vida de miles de niños y jóvenes zacatecanos.