■ El problema que se presenta es que muchos hablan sólo inglés, señala Ultreras Cabral
■ La secretaría tiene nueve aulas móviles para atender a los infantes jornaleros, afirma
Artemio Ultreras Cabral, subsecretario de Planeación y Apoyos a la Educación de la Secretaría de Educación de Zacatecas (Seduzac), informó que hasta el momento se han registrado 12 mil 600 niños que han sido repatriados de Estados Unidos, pero el sistema educativo estatal tiene la capacidad para atenderlos.
El problema que se ha presentado, dijo, es que muchos de ellos hablan por completo el idioma español, para lo cual se destina infraestructura, equipamiento y personal necesario para ellos.
“Nos encontramos con situaciones donde los niños no hablan perfectamente el español y para ello estamos direccionando varios programas, uno de ellos consiste en diplomados en Inglés para maestros”, expresó.
Sin embargo, dijo que ese no es el único problema que existe relacionado al fenómeno migratorio, puesto que en el estado también existe un amplio nivel de migración interna, ya que en los campos agrícolas se encuentran cantidades importantes de niños jornaleros, cuyas familias provienen de otros estados.
Ultreras Cabral expuso que para atender a esos niños se implementa el Programa de Educación Básica para Niños de Familias de Jornaleros Agrícolas Migrantes, mediante el cual se les atiende y “se les tiene integrados en 33 escuelas, donde tenemos maestros que hablan lenguas étnicas”.
Además, informó que la Seduzac cuenta con nueve aulas móviles que se trasladan a varios puntos de la entidad con el propósito de atender a los niños jornaleros, de manera que en total se ofrece el servicio educativo a 417 niños, la mayoría de ellos en Río Florido, en el municipio de Fresnillo.
“Esa es la manera como la Seduzac cumple con uno de los preceptos de integración y no exclusión que vienen consagrados en la propia Constitución, a efecto de que todos los niños zacatecanos por nacimiento o de tránsito, tengan el servicio educativo”, indicó el subsecretario.
Asimismo, Ultreras Cabral comentó que el único gasto adicional que implica el fenómeno migratorio es el necesario para el mantenimiento de las aulas móviles y para pagar a los maestros que se contratan para éstas, las cuales son temporales debido a que esos niños sólo permanecen en el estado durante cierto periodo.
No obstante, aseguró que esos programas cuentan con un presupuesto suficiente para atender esa situación, y aunque no se puede planear debido a que la migración interna es muy variable, “se intenta generar condiciones para que esos niños sean atendidos” en conjunto con otras instancias.