■ La pugna entre las humanidades y las ciencias duras es falsa: Rosa Cecilia Trejo Acuña
■ El evento es el más importante acto académico que se lleva a cabo este año, señala cronista
La pugna entre las humanidades y las ciencias duras es falsa, fue creada por los sistemas utilitarios, pero no a partir de la realidad del ser humano, dijo Rosa Cecilia Trejo Acuña, directora de la Unidad Académica de Letras de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), en discurso de apertura al primer Coloquio Nacional de Literatura Mexicana.
“Decidir adentrarse en el mundo de las humanidades no implica olvidarse del conocimiento arrojado por las ciencias duras sino aceptar que la curiosidad de la razón y del espíritu desean conocer el fondo vital del ser humano con todo lo que implica su historia, su pensamiento, su sensibilidad artística, su creatividad e imaginación y sobre todo lo que lo conforma como tal: su lenguaje”, afirmó.
Su intervención se agregó a la ofrecida ayer en el foyer del teatro Calderón, por Manuel González Ramírez, titular de la Crónica del estado y Armando Silva Cháirez, Rector de la UAZ, en el evento inscrito en el programa académico conmemorativo por el Centenario de la Toma de Zacatecas.
Trejo Acuña ofreció cuestionamientos sobre la manera en la que hoy los jóvenes inmersos en las redes de comunicación se vinculan al conocimiento de las humanidades, o se distraen de ello, la necesidad del estudio de estas disciplinas y el embate que han recibido desde el neoliberalismo.
Hizo defensa de la universidad pública “que se ve cada día más vulnerable y amenazada”, como un espacio de formación integral, que tiene entre otros papeles, el de formar lectores y generar seres humanos “capaces de discernir”.
Se refirió a las carreras humanísticas, como aquellas que requieren candidatos “dispuestos a pensar”. Y como un lugar donde la literatura, la historia, la antropología, las artes y la filosofía, todavía tienen un espacio para la reflexión, así como a su función de formar lectores que contribuyan a “entender las realidades”.
Sobre la lectura, expuso, es un instrumento contra el sometimiento y un medio de formación individual, su ejercicio generalizado y libre “supondría personas más formadas, más críticas y sin duda más independientes”, dijo.
Manuel González Ramírez, también coordinador del programa académico por la Conmemoración de la Toma de Zacatecas, propuso que la importancia de recordar este hecho histórico radica en el deber de los mexicanos de “asumir y justipreciar el carácter de creadores de la historia”.
Enumeró además las cualidades de la cultura local y a sus exponentes, entre los que se detuvo en los poetas Ramón López Velarde, Roberto Cabral del Hoyo y Veremundo Carrillo Trujillo, este último, fundador de la Escuela de Humanidades, y presente en el evento, a quien le prodigó palabras en tono de homenaje por sus 80 años de vida y su labor académica y artística.
Destacó al primer Coloquio Nacional de Literatura Mexicana como el más importante acto académico de literatura que se lleva a cabo durante el año de la conmemoración de la batalla del 23 de junio de 1914.
Armado Silva Cháirez, en breve mensaje, destacó a la literatura mexicana como una de las más prolíficas de la lengua española y dijo sobre el coloquio que constituye un importante esfuerzo del Cuerpo académico 191 de la UAZ, la UAL, el Instituto Zacatecano de Cultura y Conaculta, instancias a las agradeció la colaboración.