■ Juan Villoro será galardonado con el Premio de Periodismo Cultural el próximo domingo
La obra de Jorge Ibargüengoitia está más viva que nunca porque la realidad que retrató hace más de 30 años es la misma, incluso peor, concluyeron los escritores Juan Villoro, Benito Taibo, Antonio Ortuño, Pedro Angel Palou y Jorge Zepeda Patterson durante el homenaje al autor de Los relámpagos de agosto, parodia del México postrevolucionario.
Durante el evento que se realizó en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara 2013, el novelista, periodista, cuentista y ensayista guanajuatense fue celebrado por Juan Villoro como el reinventor del arte de la crónica con una capacidad irónica que refleja lo que somos los mexicanos.
“El nos enseñó que también el sentido del humor es un atributo de la inteligencia. Fue el profeta de la vida cotidiana de México. Vicente Fox es un personaje de Ibargüengoitia, la frase ‘Comes y te vas’, también. La realidad se parece cada vez más a la vida mexicana”, expresó el autor de Dios es redondo.
La coincidencia fue total, el humor negro es la manera particular de Ibargüengoitia para ver y relatar a México. El autor de Los relámpagos de agosto, novela que por más de 30 años estuvo prohibida en su país, sigue siendo disfrutado y por fin reconocido por la crítica como unos de los mejores escritores del siglo 20.
El humor negro, la ironía y la queja están siempre presentes en su obra, agregó Villoro quien este domingo será galardonado con el Premio de Periodismo Cultural, sin embargo su burla ofrece también una reconciliación crítica.
“Escritor mordaz y un poco cabrón, muestra además que quien no es capaz de reírse de sí mismo, no tiene derecho a reírse de los demás”. Los jóvenes que lo leen se sorprenden de ver que el país del que hablaba Ibargüengoitia sigue siendo el mismo de hoy, reiteró el escritor Benito Taibo.
Para Jorge Zepeda Patterson, las novelas y columnas que Ibargüengoitia escribió en espacios como el periódico Excélsior son verdaderos tratados antropológicos de nuestro país, mientras que para Pedro Angel Palou, autor de La ley de Herodes, El atentado e Instrucciones para vivir en México es un escritor peligroso, siempre fuera de lugar.
Jorge Ibargüengoitia, fallecido en un accidente aéreo en 1983, temió ser malinterpretado, catalogado como chistoso o bromista, pues su escritura partía siempre de una pantalla irónica. “Se trata de uno de los escritores que menos han envejecido porque el país que él cuenta no ha cambiado nada, reiteró Pedro Angel Palou.
