- Futuro Sostenible
Como todos sabemos, los municipios de Zacatecas han tenido un desarrollo muy irregular, pero estoy seguro de que es en el semidesierto donde se agudiza más la pobreza y la marginación. Desde hace 8 años la Unidad Académica de Derecho de la UAZ se ha solidarizado con la comunidad Tanques de Guadalupe, Mazapil, el último poblado que separa al estado del vecino San Luis Potosí por la carretera que conduce a Matehuala.
El motivo de la campaña que hemos emprendido es que en Tanques no hay agua potable desde hace más de 10 años y la gente bebe un líquido de un bordo o un estanque al intemperie que se aleja totalmente de las características del agua, lo cual viola este derecho humano plasmado en el artículo 4º párrafo sexto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que a la letra dice: Toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible. La realidad es que varias comunidades padecen los estragos de vivir si agua y en condiciones de abandono muy marcadas, lo cual demerita su calidad de vida sobre todo, en los niños y las personas de la tercera edad. Nos motiva analizar la evolución de la problemática del estrés hídrico y su impacto en la población humana.
Hasta hoy hemos visto como las personas van emigrando paulatinamente hasta dejar sus casas abandonadas pues el hambre y la sed, los hacen correr. La primera vez que acudí a dicha comunidad, me hice acompañar por un grupo de alumnos a quiénes di la tarea de aplicar una encuesta para verificar si efectivamente, la gente vivía sin agua y, nos encontramos cosas peores, niños con problemas de salud mental que no habían sido atendidos por la ausencia de médicos y medicinas.
Hemos dado cauce a las gestiones y han sido atendidos a regañadientes en algunas instituciones médicas, peleando incluso para que reciban la atención médica debida y, en algunos casos, tocamos puertas en las instituciones privadas para lograr el derecho humano a la salud. Sin duda, muchas oportunidades se han cerrado pero muchas más se han abierto, he sido testigo de muchos corazones bondadosos que han abrazado esta causa, entre ellos, los de mis queridos alumnos.
La última vez que fuimos, supe de un par de ellos, que soltaron el llanto después de entrevistarse en la casa de una señora quien les relató cómo sobrevivían en esa bendita región. De todo ha habido en estos años de gestión por el semidesierto, muchos sin sabores y muestras solidarias. He visto muy de cerca la indiferencia de algunas personas y autoridades que minimizan la intención de buscar algún apoyo para los que menos tienen, agradezco al universo que todavía no he pedido para mí, ya que a parte del problema que uno pueda tener hay que soportar el trato de algunas secretarias y no pocas autoridades.
La solución a los problemas de Tanques de Guadalupe, la tiene el Estado y sus órganos, por ejemplo, la Secretaría del Agua y Medio Ambiente debe tener ya una estrategia de mitigiación y adaptación al cambio climático para la región del semidesierto, después de haber realizado el primer Foro de Cambio Climático, que debo aclarar, fue el primero de 2014, ya que tuve la fortuna de promover otros tres eventos antes, uno en la Unidad Académica de Derecho (17 de mayo de 2007) y dos más en el gobierno de Amalia García (28 y 29 de septiembre de 2009 y, 19 y 20 de abril de 2010). Lo que hacemos como universitarios es realizar proyectos de investigación y vincular a los jóvenes con problemas reales de nuestro estado que demandan tomadores de decisiones sensibles, inteligentes y coherentes.
En este contexto, quiero invitarlos a sumarse a la campaña: “La indiferencia es nuestro mayor problema” a partir de la cual, acudiremos el próximo sábado 8 de noviembre a la citada comunidad, a realizar una investigación de campo y a entregar las donaciones que gestionamos junto con los alumnos de derecho. Estamos solicitando cobijas, agua embotellada, despensas, medicinas, juguetes y todo aquello que ya no tenga uso en su casa, que esté en buen estado y que pueda ser aprovechado por nuestros hermanos del semidesierto. El centro de acopio se localiza en el estacionamiento de la Unidad Académica de Derecho en el Despacho Agrario y Ambiental con horario de 9 a 15 horas y de 18 a 20 horas. Hasta el viernes estaremos recibiendo sus amables aportaciones en especie, no tenemos teletón pero si mucha voluntad de ayudar. ■
*Representante de Zacatecas ante el Consejo Consultivo Nacional de Medio Ambiente de la Semarnat