Y entre muchos problemas que sufrimos – ahora más que nunca – quienes habitamos estas tierras dejadas de la mano de Dios, además de la VIOLENCIA y de la INSEGURIDAD, del deterioro económico, de los malos gobiernos y muchos más, tenemos el asunto de los problemas para transitar en la capital de nuestro estado debido a los cierres que diversas organizaciones que, ante sus problemas con la autoridad, deciden cerrar las vialidades más importantes (las cuales solo son una) y causar la molestia de cientos, o tal vez de miles, que sufren la congestión de las supuestas vías alternas y tardan horas para llegar a su destino.
Esta semana volvió a suceder – ya es cosa de una o dos veces por semana – que una veintena de sujetos, tal vez con razones justas, deciden bloquear el bulevar, vía principal de circulación en nuestra ciudad capital, y provocar, durante 7 horas, un desorden y caos vial sin precedentes.
La pregunta que vuelvo a hacer – insisto – es por qué tenemos que pagar terceros, es decir, el resto de la sociedad que ni la debe pero sí la teme, porque literalmente miles de personas, que transitan de un lugar a otro, con la necesidad de llegar casi siempre por razones laborales, pero también por muchas otras, se ven impedidos para llegar debido a que las vías esenciales están bloqueadas Y POR QUÉ NO DECIRLO, TAMBIÉN PORQUE LAS AUTORIDADES QUE SUPUESTAMENTE TENDRÍAN QUE APOYAR LA VIALIDAD – la antigua policía de tránsito – en realidad la entorpecen aún más, limitando la vialidad mucho antes o mucho después de los dichosos bloqueos.
Es totalmente inadecuado que tengamos que pagar justos por pecadores, porque cada una de estas protestas públicas respetadas, en el ámbito de la constitución, como una libertad de expresión y manifestación, sean provocadas por ACTITUDES NEGLIGENTES – la mayoría de las veces – de aquellos que nos gobiernan y que perjudican a las agrupaciones que así deciden manifestarse porque sienten que es la única forma de ser escuchados, PERO AQUÍ LA PREGUNTA ES por qué tiene que haber un BLOQUEO y daños a terceros por una actitud omisa, por parte de las autoridades, a la hora de escuchar a quien justificada, o algunas veces, injustificadamente, tiene una queja que tiene que esperar un bloqueo de esta naturaleza para ser escuchada.
Aun y cuando los defensores a ultranza de la libertad de manifestación se rasgan las vestiduras cuando alguien propone algún tipo de solución – como es el caso – TENDRÍAN NECESARIAMENTE QUE REGULARSE ESTAS MANIFESTACIONES, y la regulación tendría necesariamente que salir de la LEGISLATURA ESTATAL, que como todos sabemos SIRVE PRÁCTICAMENTE PARA MALDITA LA COSA, porque, fuera de realizar exhortos, que no son más eficientes que las llamadas a misa, su eficacia es prácticamente nula o cercana a 0, ya no digamos la inasistencia de sus miembros a un trabajo que les deja importantes remuneraciones.
SE DEBE LEGISLAR AL RESPECTO proponiendo, por ejemplo, que las manifestaciones se realicen en LA PLAZA DE ARMAS, o bien, BLOQUEANDO LAS OFICINAS A LAS CUALES CORRESPONDA EL PROBLEMA, PERO DE NINGUNA FORMA A LAS VIALIDADES.
Y cuando de bloquear una vialidad se trata, LA LEY TENDRÍA QUE PROTEGER EL DERECHO DE TERCEROS A LA CIRCULACIÓN LIBRE – hasta donde sea posible de bloqueos – es decir, los manifestantes podrían, en el peor de los casos, bloquear solamente un sentido de una vialidad, y el sentido bloqueado tendrá que dejar libre mínimamente un carril – si se trata de una vialidad de dos carriles – o dos si fuera de tres o más carriles, invitando a los “protestantes” a manifestarse en la PLAZA DE ARMAS o en CIUDAD ADMINISTRATIVA o bloqueando los accesos a las oficinas a las que están cuestionando sin lesionar a terceros.
Pero los legisladores no dejan de sorprendernos, como es el caso de una diputada que propone elevar a ley la búsqueda de la reducción de los niveles de suicidio, como si tal cosa fuera posible, porque fuera de proponer apoyo a causas de las que desconocen absolutamente todo – como es el tema del autismo – tendrían que buscar leyes que fueran realmente de mayor utilidad para la ciudadanía.
Permítanme poner tan solo otro ejemplo que se me viene a la mente, EL DE MULTAR A TRAVÉS DE LA POLICÍA DE TRÁNSITO Y VIALIDAD a todos aquellos que vean utilizar el celular mientras manejan, ASÍ ESTARÍAN LITERALMENTE SALVANDO MUCHAS VIDAS porque cada uno de nosotros simplemente observemos y veremos que quien viene del lado contrario mira su celular Y HASTA TEXTEA, en vez de ver lo que tiene frente al volante, qué tan difícil sería que en su celular el policía tomara una foto de quien rompe la ley de no utilizar el celular y con ello justificara una multa significativa que seguramente evitaría, en alguna manera, que el que fue multado cometiera nuevamente el mismo delito, y de esta forma hasta el municipio o el estado se harían de recursos adicionales que no les caerían nada mal.
Pero no, las autoridades siguen pensando en otras cosas, y vemos cómo la nueva gobernanza centra su actuar en el reencarpetamiento de vialidades y carreteras como si no nos acordáramos que eso mismo hizo MULTIMILLONARIO AL COMPADRE – y socio – DE RICARDO MONREAL, el SR. AGUIRRE DE FRESNILLO, donde se puso a pavimentar vialidades y carreteras a diestra y siniestra. Señores, no se olviden que ya no nos chupamos el dedo, sabemos cómo se las gastan a la hora de obtener recursos mal habidos, como cuando algún alcalde nos habla de cambiar las luminarias, que todos sabemos que es la forma más simple de hacerse llegar de recursos al bolsillo, en actos que no ocultan sus altos niveles de corrupción.
Ya veremos cómo el segundo piso, o la autopista a Aguascalientes o el PLATABUS, no serán de forma alguna terminados en el actual gobierno, todo lo demás no son más que caminos para hacerse de recursos que engorden el patrimonio personal.
Y por favor, ALCALDE MIRANDA y LIC. VILLASUSO – Secretaria de Economía del Ayuntamiento – no nos salgan con la tan trillada frase de HABLAR BIEN DE ZACATECAS que eso no atraerá a nada, simplemente expliquen cómo le dieron la espalda al PROYECTO CULTURAL POLICLÍNICA SIERRA DE ÁLICA que prometieron apoyar, más acciones y menos palabras, que las palabras se las lleva el viento.
