En una reciente entrevista, David Octavio García Flores, director general de la Junta Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas (JIAPAZ), destacó los avances logrados en los últimos años en la gestión del agua en Zacatecas, especialmente en el marco de la celebración del Día Mundial del Agua, el 22 de marzo.
Sin embargo, también abordó los desafíos relacionados con el abastecimiento, a pesar de la significativa reducción en la morosidad, especialmente frente a la reciente temporada de estiaje.
Uno de los logros más importantes mencionados por García Flores fue la reincorporación de 11 pozos que se habían perdido durante los últimos años.
«Recuperamos 11 fuentes que se habían perdido en los últimos 15, 20 años y las recuperamos, pues, en 3 años de trabajo», explicó.
Aunque no todos estos pozos abastecen directamente a las zonas urbanas de Zacatecas y Guadalupe, han sido fundamentales para mejorar el suministro de agua en comunidades rurales.
Entre los ejemplos destacados, García Flores mencionó el pozo de Santa Rita-Vetagrande, donde la comunidad llevaba años sin acceso a agua debido a la pérdida de su pozo original.
«Santa Rita-Vetagrande tenía años con problemas, habían perdido su pozo para esa comunidad y lo repusimos con un pozo nuevo, una línea de conducción nueva y una sectorización en la comunidad nueva», señaló.
En el caso de Sauceda de la Borda, también se perforó y equipó un pozo en 2022, resolviendo los problemas de abastecimiento de agua en esta comunidad.
Sobre los problemas de abastecimiento en algunas comunidades, García Flores destacó la existencia de «focos rojos».
Uno de los casos más críticos es Tacoaleche, que enfrenta dificultades debido al desgaste de su pozo. No obstante, ya se han tomado medidas al respecto.
«Hemos perforado un nuevo pozo, estamos por equiparlo y en una o dos semanas estará funcionando», aseguró.
Además, mencionó que este año se prevé la construcción de un pozo en la comunidad de San Miguel, dado que el actual, con más de 40 años de operación, presenta fallas. «El ademe de acero que se utiliza ya está dando problemas», añadió.
Asimismo, resaltó la importancia de que la sociedad contribuya al buen uso del agua. A pesar de los avances, advirtió que las condiciones del servicio aún están lejos del nivel ideal.
«Dependemos mucho de que la sociedad ponga de su parte en cuidar esa cantidad de agua que le entregamos», comentó. En este sentido, recomendó a los ciudadanos adoptar prácticas como revisar los tinacos y cisternas, y evitar el desperdicio de agua al no lavar las banquetas ni los vehículos con manguera, sino con cubetas.
Respecto a la legislación, García Flores afirmó que la Ley de los sistemas de agua potable y alcantarillado del estado de Zacatecas permite sancionar a quienes desperdicien el agua.
«Sí está legislado, y el organismo tiene la facultad de sancionar a las personas que desperdicien el agua», señaló. Sin embargo, reconoció que la participación ciudadana es clave, y resaltó el fenómeno de denuncias ciudadanas a través de plataformas como WhatsApp y Facebook.
El director también informó sobre la importante disminución de la morosidad en el sistema de agua en la región. Según sus palabras, la morosidad, que en 2021 alcanzaba más de 25 millones de pesos, ha caído a alrededor de 9 millones de pesos, lo que representa una reducción de aproximadamente 15 millones.
Aunque la morosidad sigue fluctuando, García Flores destacó que la tendencia ha sido favorable, gracias a la comprensión de las fluctuaciones estacionales, como los gastos familiares cuando los niños regresan a la escuela. No obstante, precisó que, aunque la morosidad nunca desaparece por completo, los esfuerzos han logrado una significativa reducción.
Asimismo, destacó el apoyo del gobierno del estado a través de reuniones de consejo y la gestión de recursos, señalando que aproximadamente el 60% de los fondos para la perforación de pozos provienen del Programa Estatal de Obra (PEO), mientras que el 40% restante es proporcionado por PROAGUA. Este apoyo ha sido fundamental para consolidar obras de rehabilitación de colonias.
En cuanto a la infraestructura, García Flores destacó que «al 60% de la zona conurbada ya hay que cambiarle las tuberías de agua y drenaje». Este es un desafío considerable, por ello, subrayó la importancia de desarrollar proyectos específicos para la rehabilitación de estas áreas.
Uno de los puntos más críticos discutidos fue la situación de Guadalupe, que enfrenta una alta demanda de agua debido al crecimiento poblacional.
«Guadalupe es el mayor reto para JIAPAZ, operativamente hablando, porque es el de mayor población y el que menos tiene agua», destacó.
Con el crecimiento acelerado de la zona conurbada, la principal preocupación es el abastecimiento de agua, especialmente en áreas como la zona de Villas de Guadalupe y las nuevas colonias.
Sobre los esfuerzos por gestionar y conservar el agua, el director hizo un llamado a la población a «cuidar el agua, administrarla bien y no desperdiciarla», especialmente con la llegada de la temporada de estiaje.
También destacó la importancia de las sanciones por el mal uso del agua, mencionando que, en ciertos casos, las multas pueden llegar a ser de hasta 10 mil pesos, dependiendo de la gravedad de la infracción.
Finalmente, hizo un llamado a la población para prepararse para los meses más críticos del estiaje, que suelen ocurrir entre abril y junio, cuando las temperaturas pueden superar los 30 grados centígrados.
«Cuando aumenta la temperatura, aumenta el consumo de agua», concluyó, instando a los zacatecanos a ser responsables con el uso del agua para enfrentar los desafíos que se avecinan.