■ Correlación de fuerzas no ha permitido que el neoliberalismo se reoriente: Galbraith
■ Dice que la política económica estadounidense no tendrá con Trump cambios sustanciales
Sí se han generado alternativas de política macroeconómica al neoliberalismo pero la correlación de fuerzas no ha permitido que se reoriente o modifique, como lo exhibieron los procesos electorales de Francia y Alemania.
Persiste la lucha y el debate en torno de este modelo económico depredador a nivel planetario. Es un modelo que se cae. No obstante, no hemos sido capaces de tener la fuerza de imponer el nuevo modelo emergente, dijo James K. Galbraith.
El economista norteamericano, quien fue asesor de Yanis Varoufaquis, ex ministro de Economía de Grecia en el gobierno de Alexis Tsipras, refirió que es extremadamente difícil para un país pequeño, utilizó la expresión “débil”, como el que se cita, enfrentar al gran capital financiero europeo que representan las economías de Alemania y Francia, y a su banco central, quienes constituyen la denominada “troika” que impuso a los griegos la continuidad en las políticas neoliberales. Por lo cual la experiencia de Syriza, no fue exitosa, dijo.
No obstante, países sudamericanos como Brasil, Argentina, Chile, Ecuador y aun Uruguay, más fuertes que Grecia, tuvieron una cierta capacidad en los últimos 15 años para reducir sustancialmente la pobreza en sus poblaciones.
“Hubo importantes modificaciones”, pero acotó, el capital financiero ha podido recuperar terreno, como lo expone el caso de Brasil, por la vía de “un golpe de estado parlamentario”, o de Argentina, por la vía parlamentaria tradicional, para hacer retroceder estos logros.
“En Ecuador persiste el modelo con una orientación que diríamos, más activa sobre la economía nacional”.
James K. Galbraith estuvo ayer en Zacatecas en la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo de la UAZ, para ofrecer una conferencia sobre la evolución de la desigualdad y su relación con el capital financiero global, en que analizó el fenómeno desde 1963 al año 2008, en 149 países.
Su presencia en el país tenía como objetivo ofrecer una exposición ante los integrantes del Senado de la República, misma que se suspendió por los efectos del sismo del pasado 19 de septiembre, estuvo asimismo con otra conferencia en la Universidad Nacional Autónoma de México.
En entrevista para La Jornada Zacatecas aseveró que la política económica estadounidense que se inserta en lo que él mismo ha establecido como un estadio del capitalismo que se caracteriza como “un modelo depredador”, no tendrá con Trump cambios sustanciales.
El presidente estadounidense que se expresa altamente agresivo contra los migrantes de origen mexicano y contra el propio país, expresa una actitud proteccionista que responde a la lectura de los sectores industriales afectados por la globalización, ubicados en Detroit, Michigan, Wisconsin y Pensylvania, que se constituyeron en sus electores.
El caso de Texas no fue diferente cuando ganaron los republicanos (con cuya ideología se expresan coherentes la crítica a la apertura y el proteccionismo).
De esta manera Donald Trump se sintió obligado a responder a sus expectativas, “pero creo que no hay una política económica claramente diferente sino es el simple proteccionismo muy parecido a lo que planteó Inglaterra cuando optó por el Brexit”.
El discurso antiinmigratorio está muy ideologizado, sin embargo, las comunidades de migrantes son muy importantes para Texas y lo son para los Estados Unidos, expuso.
James Galbraith reiteró que no espera que se den grandes cambios en la economía estadounidense y en sus políticas financieras, ya que son los actores sectoriales que se encuentran en estos círculos quienes están impulsando estrategias de incidencia en las decisiones de la Casa Blanca, y por tanto, en su postura ante el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que actualmente se encuentra en un proceso de renegociación.
El tema es importante porque a veces se piensa que la postura obedece solo a una persona, el presidente Trump, pero estos sectores están cabildeando e intentando conseguir una nueva versión del TLCAN, “un TLCAN plus”, con nuevas condiciones que por supuesto buscan beneficiar a la economía norteamericana en su problemática interna.
Galbraith tiene ya más de 40 años trabajando con el tema de las políticas públicas y el desarrollo, en los que es un referente junto con Paul Krugman y Joseph Stiglitz; sus análisis e investigaciones han arrojado planteamientos alternativos al neoliberalismo, de políticas macroeconómicas.
Hoy dijo, la globalización y el modelo depredador que constituye el capital financiero se presenta como un terreno de disputa a nivel mundial, donde la correlación de fuerzas aún no permite la emergencia de planteamientos distintos aunque los ha habido como opciones en los procesos electorales recientes de Francia y Alemania.
James K. Galbraith es profesor titular en la Universidad de Texas, en Austin; donde es responsable del programa de Desigualdad y Globalización. Hizo estudios en Harvard, posteriormente en la Universidad de Yale, y finalmente en el King´s College de Cambridge, Inglaterra.
La Jornada Zacatecas agradece la ayuda en la traducción de esta entrevista, del docente-investigador en la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo, Rodolfo García Zamora.
