■ Presentan en la FIL la obra de Cervantes Saavedra en una adaptación para el público juvenil
■ El libro, herramienta para que jóvenes conozcan de amistad, lealtad y honor, entre otros valores, dice
En momentos en que el sistema es puesto a prueba, en que hasta la palabra nación está en revisión, hay una patria que no falla, ésa es la lengua española y El Quijote de Miguel de Cervantes Saavedra, afirmó Arturo Pérez-Reverte.
El escritor español presentó este miércoles en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) 2014 la adaptación de El Quijote de la Mancha para público juvenil con la consigna por parte de la Academia de la Lengua Española de facilitar su lectura sin eliminar los elementos determinantes de la historia.
El Quijote de la Mancha, destacó, es un cofre de principios y valores como la amistad, la lealtad, el honor y la compasión que permiten que los jóvenes que se acercan a él enciendan el mundo no sólo por rencor sino con esperanza.
La preocupación de Pérez-Reverte, quien se desempeñó durante varios años como corresponsal de guerra, es que en este despertar de conciencias de los últimos años no sean los hombres justos sino los ruines y crueles quienes encabecen los movimientos. De ahí que, además de participar en la elaboración de esta edición, el autor de El capitán Alatriste se asuma como predicador del Quijote.
“Vienen tiempos difíciles. Las redes sociales han hecho que se despierten y coordinen muchas conciencias. Lo que antes era el privilegio de los malos, es decir, dirigir los hilos de la demagogia, ahora les es más difícil. Con el Quijote en la mano puedes hablar de amor y de una filosofía de paz”, expuso el escritor español.
El Quijote de Cervantes Saavedra es una lección de cómo el ser humano puede ser noble aun en los peores momentos, por ello la necesidad de leerlo, explicarlo y reflexionarlo ya que incluso da herramientas para soportar el fracaso. “Ésa es una buena razón para leer el Quijote”.
La adaptación para público juvenil también está enfocada a contrarrestar el “abandono” del Quijote, puesto que sólo 6 de 22 países lo contemplan en sus planes de estudio, y ni España ni México se encuentran entre los primeros.
En este proceso, destacó Pérez-Reverte, también es importante la función de los profesores que, con un Quijote en la mano, enseñen y guíen a los jóvenes en los principios del amor, la amistad y la lealtad donde esta obra es clave. “El Quijote es un libro que asusta. Duda que muchos de quienes nos gobiernan lo hayan leído. Por ello imponen lecturas que van acordes con el mundo que nos quieren imponer”.
La adaptación de El Quijote de la Mancha realizada por Pérez-Reverte, además de presentar una historia que se centra en las aventuras de Don Quijote y Sancho Panza eliminando las historias secundarias, presenta una serie de ilustraciones inéditas, entre ellas una de Francisco de Goya, que formaron parte de una convocatoria para ilustrar la versión de 1780.
