■ Solicitudes de municipios ya rebasan las 2 mil 500, señala delegado
En 2014 se espera, por lo menos, duplicar en el estado el número de viviendas que por parte de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) se construyeron en 2013, por lo que se superarían las mil viviendas.
El delegado de esta dependencia en Zacatecas, Abelardo Córdova, explicó que después de reunirse con los presidentes municipales y con Gobierno del Estado se empezaron a recibir las solicitudes de los distintos municipios y, sin conocer aún las cifras definitivas, ya se habían superado una demanda de 2 mil 500 viviendas.
Por ello, comentó que siempre el déficit va a ser mayor que la cantidad de recursos que se puedan obtener de los fondos federales, pero aun así se buscará negociar la partida más amplia posible para construir el doble de viviendas que hace un año, cuando se edificaron 495 casas.
Aseguró que, aparte de estas cifras que se presentarán a las autoridades de la Sedatu en la Ciudad de México, por parte de la delegación en la entidad se estará llevando a cabo un trabajo de revisión de las más de 2 mil 500 solicitudes, a fin de garantizar que quienes están pidiendo una casa a los diferentes niveles de gobierno realmente la necesiten.
Es decir, agregó, se estarán realizando visitas a los demandantes para acreditar que actualmente no tengan ya otra vivienda propia, que haya en la familia dependientes económicos o que esté incluso en mayores condiciones de vulnerabilidad para imprimirle una prioridad a su trámite como en el caso de madres solteras, adultos mayores o personas con discapacidad.
Expuso que estas medidas que se han vuelto más estrictas que en ejercicios pasados se tomaron a raíz de que la dependencia empezó a detectar que muchas de las viviendas que se habían otorgado se encontraban desocupadas o eran rentadas por quienes las habían recibido sin tener necesidad.
Por esta razón, añadió, se estará trabajando de cerca también con los ayuntamientos para ubicar los inmuebles que no estén siendo habitados o a los que se les esté dando un uso incorrecto, de forma que una familia con la necesidad de vivienda pueda ocupar primero estos espacios para, posteriormente, por parte de las autoridades municipales determinar el número real de casas que se requieren en un lugar.
