■ Esta condición solamente se transformará a través una revolución interna, informa
■ “México se mueve pero no siempre en la dirección correcta”, señala la académica
La corrupción, los privilegios y el machismo que imperan en todos los espacios de la sociedad mexicana, ha generado que las mujeres se encuentren en una situación de indefensión, y por ejemplo, sólo 5 por ciento de las hijas de obreros tendrán la posibilidad de ser profesionistas en el futuro, afirmó la politóloga Denise Dresser en su conferencia impartida este sábado en la capital del estado, con motivo del quinto aniversario de la fundación Crea.
Según expuso, en México ser mujer significa tener 7 años de escolaridad en promedio, trabajar en una maquiladora representa estar en peligro de muerte e implica 30 por ciento de probabilidad de tener un hijo antes de los 20 años de edad.
“México se mueve pero no siempre en la dirección correcta. Hay algo que no funciona y tiene que ver con los privilegios, la corrupción, el machismo y con 23 millones de personas que viven con 20 pesos al día, con que una de cada cinco personas con edad entre 25 y 35 años vive y trabaja en Estados Unidos y con el éxodo de 250 mil mexicanos que cruzan la frontera en busca de oportunidades que no encuentran en su país”.
Ante esa situación, dijo que México sigue siendo un país con una democracia incompleta, sobre todo para las mujeres, puesto que la mayoría de ellas son pobres, analfabetas, subempleadas, sin representación política real, golpeadas o sin la capacidad de decidir sobre sus propios cuerpos (excepto en el Distrito Federal).
Es decir, “México sigue siendo un país donde se elogia a las mujeres el Día de las Madres, pero se les paga mucho menos por trabajar más, un país donde el acoso sexual solamente es penalizado en un manojo de estados”, indicó Dresser.
Para aspirar a más, añadió la profesora del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), una mujer necesita contar, por ejemplo, con la capacidad de determinar cuándo tener hijos, y la única forma para lograrlo es organizarse y movilizarse, sin importar el tiempo que tome.
Mientras tanto, informó que en este país todos los días alguien acosa sexualmente, golpea, viola, discrimina o deja de educar a una mujer. Como consecuencia, cada día hay más mujeres acosadas, hostigadas, golpeadas o asesinadas, y millones de mexicanos permiten que eso ocurra, “permanecen sentados, presenciando a los políticos y sus evasiones, a los jueces y sus justificaciones y a los ministerios públicos y sus claudicaciones”.
Entonces, al igual que en la época cavernícola, prehispánica y autoritaria, aseguró que en la democracia también es un buen momento para maltratar a una mujer, de acuerdo a lo que ocurre en México.
Aunado a ello, la situación de las mujeres se refleja también en la administración gubernamental, pues en el total de los 195 países independientes que hay en el mundo, solamente 17 son gobernados por mujeres, además que éstas solamente ocupan 20 por ciento de los espacios parlamentarios.
Por tanto, “de lo que se trata es de cambiar la forma geométrica del país, pasar de este triángulo de privilegios a una forma de rombo, porque en ella hay ciudadanas con derechos y oportunidades y crear mujeres emprendedoras, educadas, competitivas y meritocráticas”, indicó Dresser.
Por último, dijo a los asistentes que las condiciones de las mujeres solamente se transformarán a través de una revolución interna mediante la cual derriben el muro de la desconfianza en sí mismas y la falta de coraje para cuestionar, exigir, crear una empresa, etcétera.
