Las calles de Zacatecas se vistieron de colores, música, celebración y unión en protesta durante la 22ª Marcha del Orgullo LGBTIQ+. Miles de personas, tanto integrantes de la comunidad como sus aliados, se congregaron en la Plazuela de García para iniciar un recorrido lleno de significado y demandas por igualdad, justicia y dignidad.
El ambiente festivo y acogedor fue palpable desde el principio. Personas de diversos municipios e incluso estados vecinos, se unieron para expresar su identidad y mostrar apoyo a la causa. Con aplausos, gritos y sonidos de abanicos en movimiento, festejaron a la diversidad mientras protestaban por la lucha de sus derechos.
Familias enteras se reunieron a lo largo del recorrido para aplaudir y mostrar su apoyo incondicional. Este acto de apoyo fue significativo, ya que se destacó la importancia de la aceptación y el amor dentro de los hogares, elemento crucial para el bienestar de los miembros de la comunidad.
El punto álgido del evento fue la culminación de la marcha en la Plaza de Armas, donde se llevó a cabo un acto cívico. Activistas destacados y grandes personalidades, se unieron a la celebración para compartir su apoyo y contribuir con su lucha y presencia.
Paz Barrón Delgado, una figura clave en la organización del evento, tomó la palabra para agradecer a todos los presentes y reflexionar sobre el significado profundo de esta marcha en la historia de Zacatecas.
Con 22 años de tradición, la marcha no solo celebra los avances alcanzados en la lucha por los derechos LGBTIQ+, sino que también reconoce los desafíos continuos que enfrenta la comunidad en su búsqueda de igualdad y respeto.
Durante los discursos emotivos, se recordó a las víctimas de violencia de género y delitos de odio, honrando la memoria de aquellos que ya no están, incluido Ociel Baena, mejor conocido como le magistrade, asesinado en noviembre pasado a los 38 años, y quien fue la primera persona no binaria en ocupar el cargo de magistratura en el Tribunal Electoral de Aguascalientes y en recibir un pasaporte no binario en el país, que le fue entregado por el propio canciller mexicano, en ese momento Marcelo Ebrard.
En su memoria, se brindó un minuto de silencio y posteriormente resonaron con determinación las palabras: “Yo marcho por mi magistrade, yo marcho por amor, yo marcho porque cada día México se vuelva un lugar mejor».
Después del acto cívico, el evento se transformó en un vibrante festival artístico-cultural, con un performance de pasarelas, shows de drag, música en vivo y la actuación estelar de Aisha Doll Kills.
Este espacio creativo no solo celebró la diversidad en todas sus formas, sino que también reafirmó el compromiso de la comunidad LGBTIQ+ y sus aliados con la inclusión y el respeto en cada rincón de la sociedad.
La 22ª Marcha del Orgullo LGBTIQ+ en Zacatecas no solo fue una manifestación festiva, sino también un recordatorio poderoso de la importancia de la unidad y la lucha continua por los derechos humanos fundamentales.
Con cada paso dado y cada voz elevada, la comunidad y sus aliados demostraron que el camino hacia la igualdad es un esfuerzo colectivo que no conoce límites ni barreras, y que la celebración de la diversidad es un acto de resistencia y esperanza para un futuro más justo y compasivo.