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viernes, 19 abril, 2024
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El suicidio se puede tratar y evitar, afirma docente de la UAP-BUAZ

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Por: SCARLETT LLAMAS •

Es una de las principales causas de muerte en adolescentes

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“El suicidio es tratable y evitable”, afirmó Sergio Ordoñez Camarena, docente investigador de la Unidad Académica de Psicología de la Benémerita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ), en su conferencia “Riesgo suicida en jóvenes” y resaltó la importancia de hablar sobre este fenómeno, “una situación muy trágica para las personas que le sobreviven, una crisis terrible en lo personal y, en su mayoría, una situación evitable”.

Para abordar el tema, primero enfatizó en la relevancia del mismo, detallando que, en adolescentes y personas jóvenes, las causas de muerte principales son por accidentes automovilísticos, seguido por accidentes de otra índole y por muerte violenta, dentro de las que entra el homicidio y el suicidio, y posteriormente por enfermedades.

El suicidio, entonces, resalta como una de las principales causas de muerte en jóvenes, aunque el especialista aseveró que pudiera ser incluso la segunda causa, teniendo en cuenta que algunos de los accidentes automovilísticos o de otra índole “son suicidios en cubierto”, ocultos por la vergüenza que aún rodea el tema, la falta de empatía y el hecho de que se sigan juzgando y criticando estas situaciones.

En sí, la depresión mayor afecta más a mujeres que a hombres en proporción de 2 a 1; algunas de las explicaciones de esto son que las mujeres tienen mayor carga emocional porque, por tradición, tienen la carga de cuidadoras, que conlleva un estrés mayor que el de ser proveedor, tarea que culturalmente se le relega al hombre; también el doble rol de ser cuidadoras de casa y estar inmersas en el mercado laboral es otra explicación.

El especialista teorizó que quizá la depresión podría ser igual, pero los varones tienden a no hablar de las situaciones emocionales y negar o mentir cuando se les cuestiona, reflejándose en las cifras como que hay más casos de mujeres “porque ellas sí buscan ayuda y los hombres no”.
Esto resulta, a su vez, en que los hombres sean más susceptibles a caer en adicciones; incluso se cree que 25 por ciento o más del alcoholismo en hombres se da a causa de la depresión.

La depresión grave está ligada al riesgo suicida y consiste en una sensación de tristeza persistente, falta de interés en las cosas de la vida diaria, falta de gusto y de energía, además de una sensación de cansancio; sus síntomas neurovegetativos son alteraciones del sueño e hipersomnia; trastornos del apetito, como pérdida de peso muy marcada o ganar peso en exceso.

Inicia con la ideas de que la vida no vale la pena, lo que causa sufrimiento emocional muy intenso y cansancio de vivir, de evolucionar pasa deseo de morir con elementos pasivos, es decir, desear que de manera orgánica se pierda la vida. Posteriormente viene la ideación suicida, que despierta el interés de buscar métodos para terminar con su vida y llegar al intento, “que por fortuna en su mayoría no resultan en suicidio”, y de no cambiar la situación, resultan en un suicidio consumado.

Ante esto, el personal de salud tiene la obligación de proporcionar tratamiento y preservar la vida de las personas, idealmente de manera integral, con psicoterapia y antidepresivos.

En este sentido se permitió afirmar que es indispensable que haya una formación básica sobre conducta suicida en el personal de la salud, pues se pueden presentar en todos los rangos de edad, niveles socioeconómicos y demográfico, y estas instancias están obligadas a darle atención y seguimiento.

Ordoñez aprovechó el espacio para “tumbar mitos” como el que afirma que las personas que se quieren suicidar no lo dicen; al contrario, afirmó que hablar de suicidio da alivio para quienes lo han considerado y no planta la idea en quienes no.

Desde su perspectiva sugirió que se empleen estrategias de prevención que eduquen sobre los focos de riesgo y cuándo es aconsejable buscar consejo o asesoría. Un consejo es prestar atención a la comunicación de manera directa o indirecta donde se manifiestan los deseos suicidas; si regala cosas o las asigna “porque ya no las va a ocupar”, si se empiezan a despedir o si hace bromas constantes sobre el suicidio, hay que estar atentos.

La buena alimentación, el ejercicio y tener claras las motivaciones, son factores que pueden también pueden ser de.

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