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jueves, 28 marzo, 2024
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¿Por qué nadie quiere a Tello?

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Por: Ernesto González Romo •

Las últimas encuestas de popularidad de Alejandro Tello dicen que más del 80% de los ciudadanos reprueban la gestión del mandatario Zacatecano, todavía no terminamos el primer año y Tello tiene números muy similares a los de Javier Duarte en sus últimos días como Gobernador de Veracruz. ¡es terrible!Las encuestas coindicen con lo que se escucha en las calles y en las reuniones familiares, básicamente nadie quiere a Tello, pero ¿por qué? ¿Por qué en tan poco tiempo hay tanta desilusión?

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Lo primero que debemos entender es que Tello asumió el poder con el 38% de los votos, eso quiere decir que más del 60% de los ciudadanos no lo eligieron como su Gobernador y después de asumir el poder, Tello le ha demostrado a sus opositores que representa la impunidad y la continuidad de Miguel Alonso, por eso los ciudadanos que no votaron por él, mantiene su rechazo.

¿y qué pasa con el 38% de los que si votaron por Tello?

¿Porqué también ellos han comenzado a darle la espalda? Porque Zacatecas ya no puede contratar más deuda y Tello no tiene dinero suficiente para seguir con la farsa de los virreyes.

Estos virreyes (Peña, Tello, Alonso, Duarte, Borge, Moreira) tienen un modelo de Gobierno muy parecido: 1.- Un alto gasto en publicidad para maquillar sus limitaciones intelectuales, 2.- Obras fastuosas para simular un camino a la prosperidad, 3.- Recursos ilimitados para comprar a la oposición y ocultar su falta de oficio político 4.- Un aumento brutal del gasto en nómina para colocar en el gobierno a todos los que ayudaron a comprar los votos del triunfo y por supuesto, todo este gasto -para simular un gobierno exitoso- se financia con deuda pública.

Zacatecas ya no puede contratar más deuda y Tello intentó financiar este modelo de Gobierno con mayores impuestos, pero no fue suficiente, únicamente le alcanzó para mantener un elevado gasto en publicidad, (este año se gastará más de 100 millones de pesos para promocionar su imagen), pero el crecimiento de las redes sociales está rompiendo el modelo de comunicación y los escándalos del Gobierno rápidamente se vuelven virales.

Tello tampoco tiene obras fastuosas, ni tiene dinero para terminar las que dejó empezadas Miguel Alonso, con el fracaso del impuesto minero se fueron los recursos que Tello necesitaba para simular prosperidad con obras inútiles, es tanta la escases de obra pública que Héctor Alvarado y su equipo de comunicación tuvieron que tomarle fotos de todos los ángulos posibles a la vialidad “mina del bote” (por galerías) para llenar el boulevard con lonas que promocionan la única obra de Tello en este primer año, por supuesto que los constructores que patrocinaron la campaña de Tello están furiosos.

Y finalmente, Tello no tiene dinero para seguir metiendo a los mapaches en la nómina, por eso los priistas que gustosos compraron votos en la elección, ahora se sienten decepcionados porque “el primer priista del estado” “ni los ve, ni los oye”

Nadie quiere a Tello porque la inseguridad y la impunidad han demostrado que nada tiene de “Diferente” y los que antes lo apoyaban han comenzado a darle la espalda, porque cuando el dinero sale por la puerta, el amor se va por la ventana.

Es claro que el modelo se agotó, la farsa se cae a pedazos, miles de Zacatecanos ya sabíamos que Tello representaba impunidad y continuidad, pero sin el maquillaje de la publicidad, ahora todos pueden descubrir que los virreyes en realidad son personas incompetentes, sin proyecto de gobierno y sin la calidad intelectual suficiente para Gobernar, sin obras de relumbrón, todo mundo puede ver con claridad el estancamiento económico que llevamos años padeciendo y sin empleo en el Gobierno, los mapaches priistas han empezado a empezado a descubrir que este modelo de virreyes era una farsa.

La inseguridad, la impunidad, el estancamiento económico, la falta de inversión pública y tres generaciones de Zacatecanos completamente endeudados son razón suficiente para que nadie quiera a Tello

Algunos pensaron que las cosas serían “Diferentes”, bienvenidos a la triste realidad… y nos faltan 4 años, porque eso de que Tello iba a renunciar, también fue una farsa.

 

 

 

 

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