■ Se pronuncian organizaciones en foro; denuncian desabasto de agua por modo extractivo de minas
■ La población debe acceder a su derecho a la información en los planes de empresas, dijo
“Nosotros hablamos de nuestra experiencia, de cuánto es el desabasto de agua por el modo extractivo de las minas”, dijo Roberto de la Rosa Dávila, líder comunitario de Salaverna, Mazapil, acerca de su participación el pasado 22 de agosto en el foro proyectos de la muerte que avanzan aceleradamente en la región del Altiplano”, del que surgió un pronunciamiento firmado por entre otras organizaciones e individuos, la Pastoral Social de la Diócesis de Matehuala, la Asociación Jalisciense de Apoyo a Grupos Indígenas AC, Mazacalli AC, Nierika AC, Ofrenda Reestableciendo el Equilibrio, el vocalista de Café Tacvba, Rubén Albarrán, y el director del documental Huicholes: Los últimos guardianes del peyote, Hernán Vilchez.
El evento fue realizado en la parroquia del Sagrado Corazón de Estación Catorce, San Luis Potosí y convocado por el Comité de Ejidatarios de la Tierra, la Pastoral Social de la Diócesis de Matehuala y la propia parroquia del Sagrado Corazón de Estación Catorce.
Se realizó según la propia convocatoria, para que la población acceda a su derecho a la información respecto de los proyectos extractivos que se desarrollan o buscan desarrollarse en la citada región, pues tanto el gobierno como las empresas trasnacionales y “los poderosos”, “manejan información conforme a sus intereses y para el enriquecimiento propio a costa del despojo de los bienes de las comunidades y pueblos”.
De esta manera señalaron que su interés es dar a conocer “la versión real sobre los proyectos de la muerte que avanzan aceleradamente en la región del Altiplano”.
Al respecto, Roberto de la Rosa Dávila, quien representa a una comunidad que actualmente se enfrenta a los intereses de la minera Frisco-Tayahua de Carlos Slim por el territorio de Salaverna, dijo que la información que se difunde en un inicio, habla siempre solo de los presuntos beneficios que traerá a las comunidades la presencia de las empresas extractivas. En el caso del Altiplano potosino se les ha prometido a los wixáricas “que el agua se las llevaran entubada a sus casas”.
Dijo que es del conocimiento de las comunidades que existe un “tren de mineral” desde Estación 14 hasta Mazapil, “nosotros lo sabemos”. Razón por la que las mineras están presionando para ubicarse en la zona, una presencia que se adelanta implicará el agotamiento de los acuíferos.
Se la difundido asimismo que el basurero tóxico que quiere instalarse en Palula, generará empleos en la región, sin mencionar a la par que serán depositados allí los desechos de empresas mineras norteamericanas, que avisoran los ambientalistas, ocasionarán problemas de contaminación en la zona pero también daños a la salud de las personas.
Sobre todo esto se habló en el foro Agua y Derechos Humanos en el Altiplano Potosino-Wirikuta, para luego concretar un pronunciamiento en el que los participantes exigen el respeto a los derechos humanos de los pueblos y comunidades del Altiplano Potosino y por tanto los correspondientes del pueblo Wixárica “en su dinámica y actividades tradicionales”.
En este sentido, exigen asimismo se les garantice a los pobladores ancestrales de la región el acceso al agua, “sobre cualquier actividad industrial y/o mega proyecto que pretenda implementarse en nuestras tierras” y que tanto el gobierno mexicano en sus tres niveles y los poderes del Estado, “actúen en favor de la destrucción de nuestro territorio sagrado de Wirikuta y de todo el Altiplano”.
Por el contrario reclaman que las citadas autoridades detengan el proyecto del “tiradero de desechos tóxicos que se pretende instalar en Palula” y se cancelen “todos los proyectos mineros que amenazan nuestros territorios”.
