■ Se necesitan fondos para infraestructura hospitalaria y medicamentos especiales, que tienen alto costo
■ En el estado solamente se llevan a cabo trasplantes de riñón, córnea, hueso y tendón
La poca infraestructura y la falta de personal médico certificado, ha ocasionado que Zacatecas ocupe uno de los últimos lugares del país en el número de trasplantes de órganos. Según registros del Centro Estatal de Trasplantes, en la entidad solamente se realizan de riñón, córnea, hueso y tendón. Actualmente hay 36 personas en lista de espera por una córnea y 32 por un riñón.
Dicha información la dio a conocer la legisladora María Hilda Ramos Martínez, quien esta semana presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Salud de Zacatecas para fortalecer el Programa de donación y trasplante de órganos, tejidos y células, el cual dijo, no ha tenido los resultados deseados.
La priísta propuso en sesión del Congreso hacer cambios a la ley a fin de reforzar la infraestructura hospitalaria y en concreto planteó que en el Presupuesto de Egresos del estado para 2017 se contemple una partida presupuestal que sea suficiente para el tema de la donación de órganos.
Relató que actualmente en Zacatecas sólo el Hospital General Luz González Cosío tiene licencia de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), para trasplantar riñones y córneas; el hospital privado San Agustín únicamente puede trasplantar riñones; el doctor Horacio Ponce Castañeda tiene licencia para hacer trasplante de córnea, y el hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la capital, así como el Hospital General de Fresnillo sólo tienen licencia de extracción de órganos y tejidos.
Además, detalló, aquí solamente se realizan trasplantes de riñón, córnea, hueso y tendón. Los renales se iniciaron en el año 2013 y se han realizado 33 hasta esta fecha: 18 en el Hospital General y 15 en el San Agustín.
Hay registrados 20 trasplantes de córnea en el Hospital General de Zacatecas y en el presente año se hicieron las primeras donaciones de tejidos, músculo-esquelético (hueso-tendón).
Las cifras, dijo la diputada, evidencian que se requiere de mayor infraestructura, y sensibilizar a la población para mejorar los índices, sobre todo de donadores cadavéricos; dado que un alto porcentaje de trasplantes es de vivo a vivo, cuando una persona fallecida apta para donar, puede salvar alrededor de seis vidas.
Hilda Ramos aseguró que el principal obstáculo para la donación de órganos aún es la insuficiencia de recursos económicos, tanto para la infraestructura hospitalaria, como para los medicamentos que se requieren antes y después del trasplante, así como para personal médico certificado; lo que implica el desaprovechamiento y la escasez de órganos disponibles, y que se limiten las posibilidades de los pacientes en lista de espera para recibir el trasplante que necesitan.
A esta fecha existen en el país 20 mil 345 personas que requieren recibir un trasplante: 12 mil 418 esperan un riñón; 7 mil 436 una córnea; 411 un hígado; 58 un corazón; 10 personas requieren un páncreas y una persona espera recibir un trasplante de corazón y pulmón.
Refirió además que la Ley de Salud de Zacatecas no es armónica en relación a este tema con la Ley General de Salud; lo que hace necesario modificar la legislación estatal para observar los criterios mínimos de cumplimiento obligatorio.
Dentro de las propuestas contenidas en la iniciativa de reforma también se contiene la regulación del consentimiento tácito, además del expreso, para que las personas puedan donar órganos, tejidos o células. Con esta opción se pretende simplificar el procedimiento para otorgar el consentimiento para la donación, logrando así una mayor celeridad en los trámites administrativos.
También destaca la propuesta de que los trasplantes entre vivos se puedan realizar no sólo entre familiares, sino que cuando no exista donador relacionado con algún tipo de parentesco, sea posible realizar una donación, siempre y cuando la apruebe el Consejo de Trasplantes y el donador otorgue su consentimiento ante notario público; debiendo precisar que el consentimiento es altruista, libre, consciente y sin que medie remuneración alguna.
Finalmente la iniciativa señala que un trasplante renal cuesta entre 300 y 400 mil pesos; los medicamentos inmunosupresores previos a cada trasplante tienen un costo promedio de 70 mil pesos y los que se requieren después de la operación tienen un costo de 10 mil pesos mensuales siendo de por vida.