■ El municipio, incapaz de dar cumplimiento a todas las necesidades de los trabajadores: alcalde
■ Lo más apremiante, verificar las condiciones laborales que ofrecen los productores, señala
Durante los primeros días del mes de abril, en diversas comunidades de Fresnillo inicia la llegada de los jornaleros agrícolas y con ellos una serie de problemáticas que afectan a los habitantes, que van desde disturbios por exceso de consumo de alcohol hasta problemas de salud por sus hábitos y costumbres. Se prevé el arribo de al menos 5 mil trabajadores.
Como cada año, las comunidades de Río Florido, San José de Lourdes, Morelos, Monte Mariana, Seis de Enero, Plenitud, El Salto, entre otras, reciben a gran cantidad de trabajadores indígenas originarios de los estados de Guerrero, Oaxaca, Jalisco, Nayarit y Chiapas, quienes buscan conseguir el sustento de ellos y sus familias.
Aunque la actividad de recolección de cultivos inicia en el mes de junio, gran cantidad de jornaleros decide adelantar su arribo para inmiscuirse en las actividades de inicio del ciclo agrícola como volteo de tierras y retiro de maleza de los campos de cultivo y que puedan estar preparados para la siembra de tomatillo, cebolla, ajo, entre otros.
El problema es mayor en la comunidad Río Florido, donde se llega a duplicar la población al recibir aproximadamente a 4 mil jornaleros, que debido al déficit de vivienda son frecuentes las situaciones de hacinamiento que conlleva a problemas de insalubridad, tanto para ellos como para la comunidad.
Además, para este ciclo agrícola 2017 de nueva cuenta no se tendrá construido el espacio prometido desde hace cinco años para que funcione como albergue para atender la demanda de la población flotante, aunque el ejido de la comunidad de Río Florido donó el espacio para la construcción del inmueble, este tendrá que esperar a iniciar sus cimientos hasta 2018.
De nueva cuenta las autoridades municipales tendrán que hacer gestiones ante el estado y la Federación para etiquetar recursos económicos, con la finalidad de concretar la creación del albergue para jornaleros, que se pretende tenga dormitorios, baños y servicio de comedor para un aproximado de 200 personas.
Algo que resulta insuficiente durante los próximos seis meses son los servicios médicos que se proporcionan por parte del centro de salud de la comunidad, a decir de los vecinos las consultas y los medicamentos son insuficientes para los habitantes de Río Florido y con la llegada de los jornaleros la situación se complica, a tal grado que tienen que trasladarse a la cabecera municipal para recibir atención médica.
En torno a la problemática que representa el arribo de los trabajadores del campo a las comunidades de Fresnillo, el presidente municipal, José Haro de la Torre, anunció que ha sostenido mesas de diálogo con parte de su gabinete involucrado en la problemática, como son los departamentos de sanidad, limpia, alcoholes, seguridad pública, protección civil, DIF, e incluso el instituto de la mujer para frenar las agresiones a jornaleras.
También en las reuniones se ha solicitado la presencia de las autoridades de salud, entre ellas la Jurisdicción Sanitaria de la Secretaria de Salud de Zacatecas, para analizar las actividades en conjunto a realizar para garantizar el bienestar tanto de los jornaleros como de los habitantes de las colonias que recienten en materia de salud por el arribo de los trabajadores.
“El municipio es incapaz de dar cumplimiento a todas las necesidades de los jornaleros, por ello debemos de participar varios esquemas e ir en equipo”, dijo el alcalde al referirse que solicitará la participación de varias instancias estatales entre las más indispensables como DIF estatal, Desarrollo Social e incluso la Secretaría de Seguridad Pública.
Otro de los aspectos que precisó Haro de la Torre serán apremiantes es la verificación de las condiciones laborales que oferten los productores que los contratan. Reveló que existen algunos que brindan buenas condiciones y hay otros que no, e incluso optan por ocupar a los niños jornaleros, por ello iniciarán el diálogo para resolver la problemática que se presenta año con año.
El protocolo de atención a jornaleros agrícolas 2017 es el plan de acción que implementará el municipio y una de sus primeras acciones es concretar una reunión con las autoridades estatales y con ello determinar si se aplicará una partida financiera para implementar acciones para aminorar los estragos causados.
Uno de sus puntos medulares es la regulación de la venta de bebidas embriagantes durante la estancia de los trabajadores del campo. En años anteriores el exceso en consumo de alcohol provocó riñas entre los jornaleros, por ello en este año se regulará la comercialización en coordinación con el departamento de Alcoholes y la dirección de Seguridad Pública y en caso de ser necesario se sometería la cancelación de licencias para bajar el consumo.
También se ha establecido como línea de acción el evitar que habitantes de las mismas comunidades renten a los foráneos corrales para que se asienten en sitios que se convierten en dormitorios, cocinas y baños a la vez, lo que implica uno de los focos de infección más severos a atacar debido a sus costumbres.
Aunque no se tiene prevista una fecha para efectuar la reunión entre los diversos niveles de gobierno para atacar la problemática de jornaleros, ellos iniciarán su llegada en aproximadamente 15 días y con ello también comenzarán las inconformidades provocadas por los trabajadores agrícolas que apenas en octubre de 2016 habían abandonado estos lugares.
