Las reformas necesarias que muevan a México hacia una transformación de fondo al nivel que se viene anunciando: UNA CUARTA TRANSFORMACIÓN, deben realizarse en su estructura legislativa dentro de la tercera parte del mandato gubernativo, de manera tal que su implementación inicie coincidentemente en los dos primeros años del ejercicio y se consolide todo el conjunto de reformas en el quinto año a más tardar.
Ya van dos años de ejercicio gubernativo federal y el partido en el poder (MORENA), no ha sido capaz de conjugar una agenda legislativa de la magnitud que exigimos los 30 millones de mexicanos que votamos por la gran transformación y por la salida del poder, del grupo salinista enquistado durante 30 años que, por cierto, ocasionó la casi eliminación del sistema político derivado de la Revolución Mexicana llamado del “Estado de Bienestar”. Revolución de la que surgió: “La Primera Constitución político- Social del mundo”. Hoy tan parchada, con más de 600 reformas y modificaciones. Para mal.
Lo ideal hubiera sido (pero hubiera no existe), el llamado para el análisis y aprobación de una nueva constitución que rescatara todo el contenido social y político que el salinismo eliminó. Cada día que pasa es más difícil un proyecto de tal dimensión, por eso es que, cuando menos ya debiera el congreso iniciar las reformas de fondo imprescindibles para la buena marcha del país -por la izquierda- desde luego.
Un Sistema de Pensiones que “restituya” al del “Estado de Bienestar” vigente hasta 1997: Fondos de los trabajadores administrados por el Estado, con la consecuente desaparición de las llamadas afores y la eliminación de los “administradores vividores”. Una pensión vitalicia que se transfiera proporcionalmente al cónyuge que le sobrevive al pensionista. Tal cual fue diseñado por los constituyentes de 1917 y que las generaciones del 50-60 disfrutan.
El Presidente López Obrador recién ha enviado al Congreso una iniciativa de reforma al Sistema de Pensiones, sólo que conserva la estructura zedillista de las afores y a sus “administradores”, enriquecidos a costa de los ahorros de los trabajadores. Es necesario que el presidente sea un convencido del fracaso del sistema para el retiro de carácter neoliberal y simplemente, así simplemente, se retome el Sistema de pensiones del Estado de Bienestar.
Así, los que hoy son jóvenes, tendrán la garantía de una vejez con dignidad y suficiencia económica. Igual que la que disfrutan hoy sus padres.
REFORMAS DE FONDO A LA LEGISLACIÓN DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA.
Desde la última década del siglo pasado, los gobiernos de las entidades federativas asumieron como una novedad política, las diversas formas de participación ciudadana: referéndum, para que la población opinara sobre legislación; plebiscito, a fin de que la gente opinara sobre temas políticos y sociales, incluyendo sobre obra pública y el actuar de los gobernantes; e iniciativa popular, para que grupos interesados tuvieran la facultad de promover reformas o nuevas disposiciones jurídicas ante las legislaturas de los estados o el Congreso Federal.
En el caso de Zacatecas, fue el gobernador Arturo Romo Gutiérrez, quien, casi al término de su sexenio promovió adiciones a la Constitución del Estado, para integrar como figuras jurídico-políticas, precisamente al referéndum, plebiscito e iniciativa popular.
Y, en virtud de que se estableció un término para la reglamentación correspondiente, fue el gobernador Ricardo Monreal Ávila, quien promovió la Ley de Participación Ciudadana del Estado de Zacatecas, sólo que:
Obviamente no con buena intención democrática, se estableció un número muy alto de potenciales firmantes para la promoción de cualquiera de los procedimientos: cerca de 50 mil firmas, lo que hace de difícil alcance la participación ciudadana en el estado.
Logrado que fuera la implementación del referéndum o del plebiscito, Lástima margarito (como se dice a una ilusión fracasada),
el resultado del referéndum o del plebiscito ¡no tiene efectos vinculatorios! O sea que no obliga a la autoridad a acatar la voluntad popular que provenga de tales procedimientos.
Luego, entonces ¿Qué sentido tendría cualquier convocatoria para la participación ciudadana en el Estado?
Resulta imprescindible que la Legislatura del Estado modifique o legisle una nueva Ley de Participación Ciudadana para el Estado de Zacatecas. Por allí, la 60 Legislatura dejó una iniciativa que no entró a debate al haber sido obstaculizada por la entonces Gobernadora Amalia García.
¡POR FIN LA REGLAMENTACIÓN PARA EL USO MEDICINAL DE LA CANNABIS Y SUS DERIVADOS FARMACOLÓGICOS!
“La Secretaría de Salud (Ssa) envió para su revisión a la comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) el proyecto de “reglamento en materia de control sanitario para la producción, investigación y uso medicinal de la cannabis y sus derivados farmacológicos” (“La jornada”. 29 /VII /20)
Avanza la reglamentación a paso de tortuga, en tanto que los Estados Unidos investigan y producen medicamentos a base de cannabinoles de la planta, que son inmediatamente patentados con una duración de diez años en exclusividad.
Treinta cápsulas del elemento activo de la planta y que es útil para Parkinson y para epilepsia, tienen un costo de ¡mil pesos cada una!. TREINTA MIL PESOS EL FRASCO y son importados de los Estados Unidos.
¿Y qué pasa con la reglamentación del cáñamo derivado de las ramificaciones de la planta para uso industrial? Esto mientras China produce en grandes cantidades el cáñamo que luego vende a industrias textiles de todo el mundo, especialmente a los Estados Unidos, como hilo o como tela. Y el Senado dormido en sus laureles. En tanto que millones de desempleados esperan la apertura de fuentes de empleo.
Y, ¿qué decir de la reglamentación de la semilla (que no contiene cannabinoles) para uso cosmético o de pastelería? ¿Para cuándo señores senadores? Mi amigo el “Harry Postres” se encuentra desesperado por establecer su pastelería que lo saque de apuros económicos. ■
