■ Pertinente, un análisis prospectivo en caso de que la justicia estadounidense decida llamar a declarar al ex presidente Felipe Calderón: Cárdenas Hernández
Ante las declaraciones de Roberta Jacobsen sobre el supuesto conocimiento del Gobierno de México sobre nexos de Genaro García Luna con el narcotráfico, secretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón, el presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gustavo Uribe, mencionó que no tiene suficientes fundamentos para emitir una opinión al respecto, pues él no puede saber si esto sea cierto o sea falso.
También dijo que es momento de centrarse en salir de la contingencia sanitaria que azota en el mundo entero, poniéndola como prioridad ante cualquier otro hecho político por el momento, sin embargo, estas declaraciones de Jacobsen también sugieren que incluso en el país vecino del norte estaban al tanto de las andanzas de García Luna y ellos incluso intentaron que se hiciera algo al respecto, pero no se logró nada.
Al respecto de esto, Uribe también decidió no hacer algún comentario, pues aún no se puede reaccionar ante declaraciones tan fuertes que se hicieron en una entrevista para un medio de comunicación en la Ciudad de México y también quisieran esperar para poder corroborar la información.
Las declaraciones de Jacobsen sugieren incluso que había una relación de cordialidad con Joaquín “El Chapo” Guzmán con quien la República Mexicana ha tenido una historia bastante complicada, pues se le ha apresado en varias ocasiones y ha seguido con sus actividades delictivas.
Postura de Morena
Por su parte, uno de los fundadores de Morena en Zacatecas, Raymundo Cárdenas Hernández, consideró pertinente realizar un análisis prospectivo en caso de que la justicia estadounidense decida llamar a declarar al ex presidente Felipe Calderón.
“En primer lugar habría que imaginar el desgranamiento de toda una red de complicidades tejida alrededor de distintas dependencias del poder ejecutivo federal, empezando por el círculo cercano a García Luna, mandos diversos de la Policía Federal y de las élites empresariales que pudieron participar en la operación de lavado de dinero”.
En caso de que esto sucediera, señaló, también podrían verse involucrados funcionarios de alto nivel de los sexenios de Vicente Fox y Enrique Peña Nieto; gobiernos panistas y uno priísta que no sólo tuvieron vínculos con García Luna, sino que también han sido grandes promotores de un modelo económico que hoy se pretende modificar.
