■ México Lindo y Podrido… y Zacatecas otro tanto El caso de Brenda y otras linduras: ¿a cuánto el cachito de justicia?

Zacatecas observado por la Nación.
De nueva cuenta; nuestra entidad sale a relucir en el primer plano de las noticias a nivel nacional, y como siempre no lo hace por cosas positivas sino por el desastroso manejo del Caso Brenda, en tiempos en que el tema del acoso y la violencia en contra de la mujer se vuelven la bandera más importante para la sociedad, y el reclamo de justicia es el grito de moda y el elemento central para la reducción de los niveles de aprobación del Presidente de la República.
Y si AMLO cae en sus niveles de aprobación que cosa podemos esperar de Tello con los acontecimientos recientes, sobre todo el hecho imposible de entender y mucho menos de aceptar que una mujer fuera recluida por dos meses en una penitenciaria para hombres, donde como tendría que esperarse fue violada por un guardia que tendría que estar ahí para protegerla sin que nadie de las autoridades saliera a dar explicaciones convincentes de lo sucedido.
Y esto solo a un par de meses de los acontecimientos que sacudieron a la Nación y que sucedieron a finales del 2019 cuando un conflicto en el principal reclusorio de nuestro estado, el penal de Cienaguillas, se produjera 17 muertes por un conflicto como consecuencia de los malos manejos de las autoridades a cargo.
Qué hizo el gobierno estatal para combatir el problema, no mucho, destituir a quien estaba a cargo del penal, pero cuidado, no lo sacaron del sistema sino especializados como son en el arte del reciclaje, solamente lo movieron al penal de Fresnillo donde siguió actuando bajo la mirada asombrada de la ciudadanía quien hasta ahora se da cuenta de esos enroques que nada solucionan y que sirven para maldita la cosa.
Solo para después iniciar el año con la noticia que ya desbordó las fronteras del estado y se volvió una noticia nacional tratada incluso en las mañaneras por el mismo presidente de la república, el caso de BRENDA. López Obrador dijo categóricamente que tendrían que investigarse a fondo el caso y tendría que castigarse a los culpables, y claro estas palabras son un muy conocido cliché de las autoridades cuando algo de este tipo pasa, pero agregó que tendría que recibir el Secretario de Seguridad a cargo en el estado algunas lecciones sobre cómo tratar a la mujer de parte de las feministas muy activas actualmente como respuesta inesperada y por si misma violenta a los acontecimientos de violencia en contra de la mujer que se han intensificado en el último año.
Ante este grito desesperado el mismo AMLO solo se atreve a contestar – no sin algo de indiferencia – con un decálogo de buenas intenciones que claro tampoco sirve, de no ser que para ser utilizado como argumento para atacar con más fuerza al ocupante de Palacio Nacional por parte de sus detractores.
Pero regresando al caso de Brenda nuestras autoridades, las estatales no atinan a explicar lo que realmente sucedió y mucho menos a aceptar sus culpas, nunca han podido argumentar el por qué una mujer fue internada a un reclusorio para hombres. En forma velada a algún inteligente – ¿? – de la administración se le ocurre decir que realmente se trataba de un reclusorio mixto cosa que está perfectamente corroborado no ser una verdad sino una mentira más que trata de encubrir la enorme ineficacia de aquellos que se encargan de procurar la justicia – ¿de verdad? –
Pero la historia no termina ahí, tiene uno que asomarse a los medios nacionales – porque parece ser que los locales están maiceados – para enterarse que el responsable de la violación a Brenda – al principio se comentó que había sido violada más de una vez – era una vigilante del reclusorio que fue identificado desde el inicio, pero no se hiso nada, y cuando la presión de la opinión pública, sobre todo de la nacional se volvió importante, entonces se volvió a ubicar al responsable pero ¿Qué creen? No se le atrapó por que NO HABIA ORDEN DE APRENSIÓN – ¿por culpa de quien, vaya usted a saber? Por lo que en cuanto burocráticamente se trabajó la orden de aprensión, para entonces el violador había huido sin que nuestras eficientes autoridades hicieran algo al respecto.
Incluso tanto en la Fiscalía como en la Secretaría de Seguridad salen a aceptar que se les fue quien les debía por fallas que reconoció la mujer encargada de la Fiscalía especializada en asuntos de la mujer, una tal Fátima – ahora que este nombre por razones tristes no se olvida – cuyo apellido no recuerdo, que no se había elaborado en tiempo la orden de aprensión.
Y en esta comedia de errores y de enredos nadie parece resultar culpable, EN CUALQUIER LUGAR MEDIANAMENTE CIVILIZADO YA HABRÍAN RENUNCIADO TANTO EL FISCAL COMO EL SECRETARIO DE SEGURIDAD, AMBOS PUESTOS POR UN TERCERO – tan responsable como ellos – EL GOBERNADOR ALEJANDRO TELLO quien en vez de salir a dar una disculpa por lo sucedido, se molesta con todos aquellos políticos, comunicadores o simpes ciudadanos – como un servidor – por darle cuerda a un asunto como este que según él no tiene tanta importancia.
Todo esto hace que se filtre información que de otra forma no habría salido a la luz, como los VIDEOS donde se observa cómo se tortura y se trata con violencia a los reclusos en Cienaguillas no solo bajo la mirada complaciente de las autoridades sino como respuesta a ordenes claras de ellos mismos como “son delincuentes, trátenlos como tal” entre otras linduras que claramente se escuchan en estos videos que saco a la luz la televisión nacional.
Y si le sumamos el reciclaje del encargado de Cienaguillas a Fresnillo como consecuencia de la muerte de 17 reclusos de Cienaguillas hace un par de meses, la violencia que ahí se dio – y que no es cosa nueva – la forma como tratan a los reclusos – y sumémosle la tímida actuación de Derechos Humanos con sus exhortos que son menos atendidos que los llamados a misa, y sus anuncios de nuevas investigaciones – y el enojo del Señor Gobernador, nos permiten entender dónde estamos parados, y quienes son las autoridades que dirigen a nuestro estado.
Pero ahora salen a utilizar las amenazas en contra de los alcaldes para desviar la atención y que la gente se olvide de lo mero principal. ■