■ Disciplina, liderazgo y desarrollo académico, principios que distinguen a esta modalidad
■ A finales de febrero se publicará la nueva convocatoria; se plantea aceptar 100 jóvenes
El Bachillerato General Militarizado, apenas en su primer año, “ha sido un éxito, con niveles de crecimiento sólidos y con un nivel académico que ha superado las expectativas. Tenemos jóvenes con mayor disciplina no solamente hacia su escuela, sino también hacia su familia, su comunidad y más comprometidos con situaciones sociales”, afirmó Omar Gilberto Carlos Martínez, director de esta modalidad de educación media superior.
El funcionario refirió que ha sido un proyecto innovador en el estado, pero hubo dificultades en su inicio debido a que “no teníamos una base de donde partir. Había la idea y la estructura pero había que llevarlo a la práctica”.
“Para llevar a la práctica proyectos de esta naturaleza implica mucha dedicación, trabajo y compromiso: desde la selección del personal, la estructura de las actividades complementarias hasta el programa curricular, tanto en el aspecto militarizado como en el aspecto de la formación civil”, expuso.
En ese sentido, comentó que las actividades escolares inician a las 7 de la mañana y culminan a las 7 de la tarde, tiempo en el que se equilibra el tema militar, académico y disciplinar.
Carlos Martínez indicó que los jóvenes matriculados en el Bachillerato General Militarizado están preocupados por su formación personal y académica, y con la visión de un proyecto a largo plazo que mejore su calidad de vida.
“La expectativa que en primer momento se tenía con esta primer generación ha sido rebasada. Este proyecto es una realidad en Zacatecas y tenemos nuestras redes sociales invadidas, visita de escuelas y visitas de papás que tienen el interés de integrarse a la segunda generación”.
Al respecto, informó que a finales de febrero se publicará la nueva convocatoria de ingreso y en ella se explicará todo el procedimiento de prerregistro, aplicación de exámenes, entre otras, y se plantea aceptar 100 jóvenes.
Asimismo, Carlos Martínez destacó el nivel de exigencia del Bachillerato General Militarizado en todos los aspectos, al grado que los jóvenes deben obtener un promedio mínimo de 8 para permanecer en la institución.
Disciplina, liderazgo y desarrollo académico son los principios que distinguen a esta modalidad de bachillerato, y de acuerdo al funcionario, se logran funcionar mediante actividades académicas, militares y de desarrollo socioemocional.
“En este segundo semestre estamos comenzando a delegar funciones de responsabilidad, en el ámbito del liderazgo, a nuestros alumnos. Quiere decir que el proyecto tiene bases muy sólidas y tiene todos los elementos para continuar adelante”, agregó.
Carlos Martínez puntualizó que 90 por ciento de la planta docente proviene de subsistemas estatales de educación media superior; solamente se generaron espacios para el personal militar, mismo que fue contratado por la Secretaría de Educación de Zacatecas (Seduzac), instancia que también proveé la alimentación, uniformes y material didáctico.
De esa manera, los padres de familia solamente aportan una cuota de recuperación de mil 500 pesos por todo el ciclo escolar, pero con la posibilidad de que se exima de ese pago a quienes no cuenten con el recurso.
Las asignaturas que se imparten a los alumnos son Química, Matemáticas, Inglés, Lectura y Redacción, Ética, Metodología de la Investigación e Informática; mientras que en materias militares se les imparte Instrucción de orden cerrado, Legislación Militar y Formación Axiológica.
Roberto Arellano, Capitán Segundo de Sanidad retirado, manifestó que, desde su perspectiva, es un compromiso muy importante el formar alumnos de nivel bachillerato, porque es una edad muy compleja.
Consideró que este proyecto del Bachillerato General Militarizado es acertado, “porque si los jóvenes conocen los valores cívicos y éticos que nos rigen en una sociedad, pueden normar su conducta”.
En el aspecto militar, expuso que “los jóvenes reciben una academia especial que es Axiología militar, donde vemos valores y virtudes militares como honor, lealtad, abnegación y sacrificio, entre otros. Ellos ya traen una formación básica de ética y civismo, pero nosotros lo complementamos adjuntándoles información relacionada con el medio militar y esto hace que ellos se formen un carácter y entiendan que estos valores, si no se practican, no tienen ningún valor”.
Sobre las actividades que realizan los jóvenes, en el tema militar, Arellano indicó que éstas comienzan a las 6:45 de la mañana, hora en que se preparan para un pase de lista. Esto consiste en verificarla presencia física del personal y después se rinde parte al coordinador miliar y éste a su vez a las autoridades educativas civiles.
En la asignatura de Instrucción de orden cerrado se les enseña a los alumnos movimientos a pie firme básico, que conozcan la cadencia del paso redoblado. Más tarde se pasa lista y revista en la que se verifica que estén bien uniformados y que así se mantengan durante todo el día.
Al mediodía los alumnos realizan actividades de Educación Física en las que fortalecen brazos y piernas, y después de la comida se lleva a cabo otra revista, a fin de constatar que permanezcan perfectamente uniformados.
Por la tarde, se efectúa la última toma de lista y se emite una orden mediante la cual se indica el uniforme que se utilizará al día siguiente y se indica el alumno que fungirá como centinela en la sala de banderas.
Vasti Naara Herrera Hernández, alumna del Bachillerato General Militarizado, dijo que “la vida militar es disciplina y una vida muy ordenada. “Antes de estar aquí yo era muy diferente y sin duda fue un gran cambio”.
Luego de ingresar a este bachillerato, refirió que le inculcaron valores y disciplina, y de esa manera modificó su conducta y ahora planea continuar sus estudios de nivel superior en el Heroico Colegio Militar, en la Ciudad de México, y estudiar Medicina Militar.
Por último, ofreció un mensaje para los jóvenes: “que piensen muy bien en las decisiones que tomen porque, a veces, por la juventud o la edad, podemos hacer cosas de las que nos podemos arrepentir”.
