Para no complicarse más el tratamiento, el personal médico toma la decisión de amputar; mientras no esté en riesgo la vida hay que buscar alternativas: Miguel Ángel Cid
Señala especialista que al no percatarse de su enfermedad, las personas no cambiaron los hábitos de vida y las complicaciones pueden originar una neuropatía diabética
El pie diabético es una de las complicaciones que se generan cuando no se cambian los hábitos después de la detección de la enfermedad y que muchas veces termina en amputación, sin embargo, de acuerdo con Miguel Ángel Cid Báez, médico cirujano y docente investigador de la Unidad Académica de Medicina de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ), el 80 por ciento de las amputaciones, a nivel mundial, no se debieron realizar de manera inicial.
Actualmente un aproximado de 222 millones de personas en el mundo padecen de diabetes y el 50 por cientos de éstas ignora que la tienen, descubriéndola después de varios años ya cuando las complicaciones son mayores, detalló el académico, porque al no percatarse de su enfermedad, no cambiaron los hábitos de vida y las complicaciones pueden originar una neuropatía diabética.
Según explicó Cid Báez, cuando aparece el pie diabético pierden la sensibilidad y como no les duele le restan importancia a lo que les suceda, el problema es cuando pisan una piedra o algo que les provoque una pequeña herida, se comenzarán a dar cuenta cuando van dejando restos de sangre en los calcetines o las medias, pero como no les duele, reiteró, lo minimizan hasta que agrava y viene la situación dramática.
Cuando aparece el pie diabético, las personas pierden la sensibilidad y como no les duele le restan importancia a lo que les suceda, advierte el médico cirujano y docente de la BUAZ
Cuando se llega a dicha situación, muchas de las veces, de acuerdo con el especialista, el personal médico para no complicarse más el tratamiento toma la decisión de amputar, pero según estadísticas, reiteró, el 80 por ciento de esas amputaciones que se ha hecho en el mundo no debieron haberse realizado de manera inicial.
Y es que según el médico, la amputación no es una complicación de la diabetes o el pie diabético, sino que es una intervención muy precisa que se tiene que hacer cuando no hay soluciones posibles ni nada más que hacer, o bien cuando está en riesgo la vida del paciente. Pero mientras no esté en riesgo la vida, subrayó, hay que buscar las alternativas para estar atendiendo, que si bien generará mucho recurso institucional, se puede evitar la amputación si se actúa de manera rápida.
En la actualidad la neuropatía diabética ha aumentado, tanto que se habla de que un 25 por ciento de las personas que padecen la diabetes va a desarrollar el pie diabético, es decir, de cada 10 personas dos lo tendrán. Y a pesar de que no hay cifras concretas para Zacatecas, a decir del universitario, no hay mucha variación.
Finalmente advirtió que cuando esta situación se presenta y se complique, se dará una amputación y a los dos años vendrá otra más, lo que en cifras se indica que el 50 por ciento de los pacientes van a fallecer en un trayecto de cinco años, por lo que hizo un llamado a tanto a familiares, pacientes, médicos y profesionales de la salud a crear una cultura de prevención a fin de contrarrestar dichas cifras.
