■ Se necesita llamar la atención de los jóvenes y persuadirlos de otras formas: psicóloga
■ Para atacar el fenómeno es importante crear actividades artísticas, culturales o deportivas
Para que las campañas contra las adicciones sean efectivas deben contener varios elementos pero el más importante es que emita un mensaje que no sea prohibitivo, porque al partir de decir “No” se piensa que se está haciendo prevención, pero lo que se necesita ahora es llamar la atención de los jóvenes y persuadirlos a través de otras formas, considera María José Martínez Ruíz, psicóloga y directora general de Prevención contra las Adicciones de la alcaldía en Álvaro Obregón, de la Ciudad de México.
Asimismo, agrega la especialista, se debe estudiar muy bien el público objetivo, es decir, a quién va dirigido y qué se pretende a través de dicha campaña. De igual manera debe tener un enfoque de género y que se oriente a las sustancias que significan un problema para esa localidad o comunidad, apostarle a mensajes atractivos y brindar una oferta de actividades para los jóvenes.
En Álvaro Obregón se le ha apostado a esta fórmula, informa la psicóloga, y la respuesta ha sido buena, pues los talleres que imparten también están llenos pero se necesita de presupuesto para hacer más cosas. Para el caso de Zacatecas, considera que los esfuerzos deben ser locales y trabajar mucho de la mano con los municipios y con los operadores de políticas públicas y de atención a las adicciones a nivel municipal.
Y es que, a decir de Martínez Ruiz, se le deja siempre la responsabilidad de las campañas al Gobierno Federal, lo que significa una carga pesada, sin embargo, asegura, los programas que han tenido mejores resultados son los que surgen a través de esfuerzos locales, por lo que recomienda que los municipios deberían estar estudiando su público objetivo y trabajar de forma homologada con los demás municipios, pero al final cada uno debe implementar una campaña enfocada a lo que pidan o requieren los jóvenes o niños de acuerdo su realidad.
“Tienes que salir, recorrer las calles, saber cómo piensan, qué les llama la atención y entonces son ideas para diseñar la campaña pero el esfuerzo debe ser a nivel local”, enfatiza.
De igual manera considera que los complementos tecnológicos pueden ser de ayuda ya que hoy en día gran parte de los jóvenes están al tanto de las redes sociales y de las apps, pero tampoco se puede solo con esto, advierte, aunque sí es un medio importante que puede reforzar algunas campañas, pero reitera que debe haber actividades disponibles, ye sea artísticas culturales o deportivas, y por ende, tener un presupuesto destinado para éstas, porque en la medida de que se tenga captados a los jóvenes es el tiempo que se le resta al consumo de drogas.
Ante la baja percepción del riesgo que caracteriza a muchos jóvenes de hoy, que además tienen ideas mal concebidas debido en mucho sentido a campañas prohibitivas o desinformación que leen en Internet, lo que se debe es ser realista y dar la información como es, pero sobre todo, indica, se tiene que enfocar en captar al público objetivo, saber qué les gusta, qué palabras usan y generarles actividades, mientras esto suceda, asegura Martínez Ruíz, el impacto de las drogas puede ser menor, pero tiene que pensarse a largo plazo hasta contener el consumo, concluye.
