27.5 C
Zacatecas
viernes, 19 abril, 2024
spot_img

El Mirador de Heródoto Del Colegio de Jerez (1832) a la Benemérita UAZ (2019), ¿dónde queda la identidad?

Más Leídas

- Publicidad -

Por: UZIEL GUTIÉRREZ DE LA ISLA* •

Cualquier destino, por largo y complicado que sea,
consta en realidad de un solo momento: el momento
en que el hombre sabe para siempre quién es.
Jorge Luis Borges

- Publicidad -

Recordemos que la identidad es el conjunto de elementos que nos permite definirnos y reconocernos como individuos; la memoria nos hace tener conciencia de la identidad, sin ella sería imposible nuestro propio reconocimiento. En el contexto universitario ¿cómo se adquiere la identidad? y en la sociedad ¿cómo se manifiesta la identidad?

Definitivamente si no hacemos uso de la memoria y no relacionamos nuestro yo presente con el pasado, no podremos hablar de identidad porque no podemos ligarnos con el medio constituido por una historia y una trayectoria o línea de vida institucional.

Para manifestar identidad con nuestra “alma mater” es preciso conocer los elementos que constituyen su historia y hacer un énfasis en cada una de las fechas significativas y de los personajes que le dieron lustre como institución educativa en el estado de Zacatecas.

Las conmemoraciones son un aspecto importante de cualquier iniciativa comunitaria. Una remembranza, aniversario, reconocimiento o la evocación de un suceso relevante o histórico, representa para quienes lo realizan o participan en él, el orgullo de lo que significa para sí mismos o para la organización y se convierte en una oportunidad para expresarlo. Compartir una conmemoración es una fuerza poderosa que muestra a otros lo que hemos hecho como grupo o como institución y nuestra satisfacción por realizar labores representativas y vitales para el desarrollo de la misma.

Celebrar el aniversario de un hecho histórico en una institución aumenta la moral de los individuos y la colectividad que la constituye, proporciona oportunidades de relaciones interpersonales factibles de limar asperezas y fortalecer el trabajo en equipo, y permite volver la vista hacia la historia y lo que representa como pasado, nos invita a la reflexión de lo que ese hecho ha contribuido a la motivación por la superación y por constituirnos como parte de ese logro.

Olvidamos el pasado porque no tenemos la cultura de vivir el presente; algunos autores señalan que “vivimos el día a día”, sin ninguna relación con otro espacio, sin cultura, sin visión, sin sentir el ayer, el hoy y el futuro (porque como diría Lewis Carroll: “¡Pobre memoria aquella que solo funciona hacia atrás!”). Sin memoria no se tienen expectativas para el futuro, según Friedrich von Schiller, “Una memoria ejercitada es guía, más valiosa que el genio y la sensibilidad.”

Pasamos los días sin percatarnos de su significado y observo que una de las razones es no aceptar la responsabilidad de traer a la memoria la fundación o conmemoraciones de una institución o el ejemplo de vida de un personaje. Aquí y hoy pongo al servicio del presente, la memoria histórica de nuestro pasado y, tomando como pretexto las anteriores reflexiones, comparto algunas fechas emblemáticas para contribuir al fortalecimiento de nuestra identidad como universitarios:

El 5 de noviembre de 1832 se estableció el Colegio de Jerez, también conocido como “Casa de estudios”, siendo este el antecedente del Instituto de Ciencias de Zacatecas, que más tarde se convertiría en nuestra Universidad Autónoma de Zacatecas, hoy benemérita.

El 10 de octubre de 1969, día de la conversión del ICZ a Instituto de Ciencias Autónomo de Zacatecas, (aunque sabemos que el decreto inició en enero de 1960), debe ser una fecha recordada y conmemorada por lo que significó su logro para la sociedad zacatecana y lo que la autonomía representa en este tiempo, así como por las aspiraciones hacia futuro. Los nombres de Uriel Márquez Valerio; Jesús Manuel Díaz Casas; José Abraham Torres; Magdaleno Varela Luján, entre otros, deben formar parte de nuestro cotidiano reconocimiento.

20 de noviembre de 1786, nace Francisco García Salinas, padre de nuestra “alma mater”, en el poblado de la Labor de Santa Gertrudis de la Jurisdicción de Jerez. En 1821 fue nombrado regidor del Ayuntamiento de Zacatecas y en 1823 fue elegido diputado del Congreso Constituyente General de la República; después, senador, y para 1828 fue electo gobernador de Zacatecas, cargo que desempeñó de manera tal que se ganó el apelativo de “Gobernador modelo”. En 1831 promulgó la Ley de Instrucción Primaria, que la hacía obligatoria para todos los niños. En 1832, estableció la primera biblioteca pública y ese mismo año fundó el Colegio de Jerez. A 233 años su nacimiento, Francisco García Salinas es un personaje que debe estar presente en la vida académica de nuestra institución como emblema identitario.

Son repetitivas las fechas conmemorativas, me expresó un lector de esta columna, pero ¿cómo enfatizar la importancia de las efemérides y de nuestra historia como parte de las actitudes del ser universitario? Debemos promover los eventos relacionados con la evocación al recuerdo de un acontecimiento, como un elemento coadyuvante para levantar los ánimos y renovar el espíritu de lucha por la superación. Existen millones de razones para encontrar causas para promover una conmemoración institucional con la afirmación de que, independientemente de las circunstancias, cuando se quiere, siempre se puede hacer un evento memorable. Por lo tanto, los invito a que seleccionemos la causa de una celebración y compartamos la alta responsabilidad de su significado.

Hagamos historia con la historia! Cultivemos y promovamos la identidad institucional.

Así se observa el mundo desde El Mirador de Heródoto

*Cronista de la UAZ
[email protected]
[email protected]

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -