El liberalismo y la masonería aplauden las libertades y que la Universidad nos abra las puertas en el patio de Rectoría habla justo de eso, del ejercicio y la práctica de las libertades.
Dr. Édgar A. G. Encina
Hoy vale la pena hablar de un hecho histórico sin precedentes en nuestra Universidad, la celebración del VI Congreso Internacional de Historia de la Masonería y los Movimientos Asociativos Latinoamericanos y Caribeños: Nuevos acercamientos y perspectivas, siglos XVIII-XXI, organizado por universitarios liderados por el doctor Marco Antonio Flores Zavala, con el respaldo de los Programas Académicos de Maestría y Doctorado en Historia y el Cuerpo Académico 130-UAZ “Historia, cultura y sociedad en Hispanoamérica”.
Este encuentro, que reunió a destacados historiadores provenientes de Argentina, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, España, Estados Unidos, Francia, Italia, República de El Salvador y las ciudades mexicanas de Aguascalientes, Ciudad de México, Guadalajara, San Luis Potosí y Zacatecas, se llevó a cabo en colaboración con la Casa de Altos Estudios Don Fernando Ortiz de la Universidad de La Habana (Cuba), el Centro de Estudios Históricos de la Masonería Española (CEHME) de la Universidad de Zaragoza (España), la Revista de Estudios Históricos de la Masonería plus (REHMLAC+) de la Universidad de Costa Rica, y el Centro de Estudios sobre Esoterismo Occidental / UNASUR en Buenos Aires.
El VI Congreso fue el marco para reconocer la trayectoria y aportaciones del máximo investigador de la masonería, el doctor José Antonio Ferrer Benimeli, que, parafraseando las palabras del doctor Marco Antonio García Robles, de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, es la persona que sintetizó la metodología con la que se estudian los fenómenos asociativos modernos, quien revirtió los relatos oscurantistas y las teorías conspirativas sobre la masonería para darle forma como objeto de estudio científico.
Uno de los grandes méritos de este especialista es la fundación del Centro de Estudios Históricos de la Masonería Española, del que actualmente es su presidente de honor. Con sus investigaciones lleva más de 50 años “desmontando mitos sobre la participación de las logias y los masones en los grandes movimientos sociales de los últimos tres siglos”.
El reconocimiento fue entregado por el secretario general de la BUAZ, Rubén Ibarra Reyes, en representación del rector Antonio Guzmán Fernández, el 22 de octubre, fecha en que el homenajeado inauguró la Cátedra Internacional de Historia de la Masonería con la conferencia “El masón Simón de Bolívar, entre el mito y la verdad histórica”; esta cátedra se impartirá cada año en la Universidad. Nuestro reconocimiento al doctor Flores Zavala, gran impulsor de este logro.
Este VI Congreso ha puesto en alto a nuestra Universidad, ha sido un escaparate para mostrar parte de sus grandes virtudes y atributos. Como muestra, les compartimos algunos comentarios vertidos por los asistentes.
Doctor José Antonio Ferrer Benimeli, el homenajeado: “Es un paso importante porque es la Universidad la que hace el estudio de una asociación, no son ni los propios masones, aunque también los haya entre los historiadores, ni los enemigos de los masones, que también los hay”.
José-Leonardo Ruiz Sánchez, catedrático de la Universidad de Sevilla: “La Universidad Autónoma de Zacatecas se incorpora a esa red (de sucesión de encuentros sobre masonería), pero formando parte habiendo sido sede de esa serie de congresos; el nivel de las intervenciones es muy alto y la creación de una cátedra de historia de la masonería, que lleva el nombre de José Antonio Ferrer Benimeli, es algo que debe enorgullecernos a todos los que trabajamos el tema, pero también a la Universidad que lo ha impulsado”.
Miguel Guzmán Stein, de la Universidad de Costa Rica: “Nos damos cuenta que además hay una universidad que pesa en el lugar, que maneja investigación de altura, que tiene un cuerpo formativo de alto nivel y aprovecha los recursos que tiene en la ciudad, no solo la información que tenga en la biblioteca”.
Alfonso Vázquez Sosa, director del Instituto Zacatecano de Cultura, dependencia que facilitó una sede del evento: “Este encuentro permitirá la articulación tanto de quien lo está viendo desde el punto de vista académico, como quien lo ve desde el aspecto investigativo y de quien lo practica, entonces a todas luces pienso que es un evento pertinente, necesario y ante todo, ilustrativo”.
Vicente Sánchez Murillo, Muy Respetable Gran Maestro de la Gran Logia del Estado de Zacatecas, expresó que la masonería tiene 62 años de trabajar de manera interrumpida en la entidad y se estima que hay 600 miembros activos, entre los que se encuentran alrededor de 13 logias femeninas.
Cierro este artículo con las palabras del mismo universitario que cito en el epígrafe, el doctor Édgar A. G. Encina, miembro del comité organizador: “La masonería, las paramasonerías, las sociedades patrióticas de pensamiento, filosóficas y religiosas, por ejemplo, junto con otras formas asociativas vinculadas a la formación del ciudadano, representaron instrumentos y mecanismos de cohesión social que facilitaron el desarrollo de la identidad y de la cultura de los pueblos y las naciones, a la vez que fueron espacios de difusión de las ideas políticas, las corrientes de pensamiento, los gustos estéticos e infinidad de asuntos”.
A Érika Flores y a Humberto Núñez agradezco el apoyo para la realización de este artículo.
Así se observa el mundo desde El Mirador de Heródoto.
*Cronista de la UAZ.
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