■ Se trata de personas que están en la economía formal, según Data Coparmex
■ El organismo empresarial señala que en el segundo trimestre de 2019 sólo 505 de los empleos formales en el estado permitía al trabajador cubrir las canastas alimentaria y no alimentaria
En el último año en Zacatecas creció el número de trabajadores que, pese a estar en la economía formal, no alcanzan con su sueldo la línea de bienestar, es decir, no pueden cubrir los gastos de la canasta tanto alimentaria como no alimentaria que determina el Coneval para medir los índices de pobreza.
Esta evolución negativa de los salarios frente a los gastos básicos se muestra en las estadísticas publicadas trimestralmente por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en la base de datos denominada Data Coparmex.
En concreto, el indicador se llama #MejoresEmpleos y, de acuerdo con la explicación que se realiza en la plataforma, se obtiene dividiendo el número de trabajadores formales que perciben un sueldo suficiente para cubrir la línea de bienestar entre la cantidad total de empleados registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
A partir de este cálculo, el organismo empresarial concluye que durante el segundo trimestre de 2019 sólo el 50 por ciento de los empleos formales en el estado permitía al trabajador cubrir las canastas alimentaria y no alimentaria.
Esto implica que la mitad de los zacatecanos que labora en la formalidad no tiene ingresos suficientes para hacer frente a estos gastos que, según el Coneval, incluyen los alimentos básicos, así como el transporte público, el cuidado de la casa, los cuidados personales y de salud, la educación, cultura y recreación, los artículos de esparcimiento, las comunicaciones y servicios para vehículos, vivienda y servicios de conservación, los enseres domésticos y las prendas de vestir, calzado y accesorios, entre otros.
Este porcentaje empeoró en el último año ya que durante el mismo trimestre, de abril a junio, de 2018 la cantidad de trabajadores que sí podía cubrir estas necesidades alcanzaba el 55.7 por ciento y cayó al 50 por ciento.
