■ En promedio, destinan a este rubro un 8.8% de sus gastos en alimentos y bebidas
■ Entre los hogares con menos ingresos se destina a productos de origen animal un 33% del total de los gastos y las viviendas con más ingresos ocupan 40% a este rubro
■ En los hogares más pobres se destina 10% de los gastos a comidas fuera de la vivienda; en los más ricos el porcentaje es del 40
En México se gasta más en refrescos y bebidas alcohólicas que en frutas. La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos en los Hogares (ENIGH) 2018 muestra que, en promedio, un 8.8 por ciento de los gastos en alimentos y bebidas se destina a bebidas con o sin alcohol, mientras que a frutas se va un 4.6 por ciento.
Aunque esta tendencia es la misma tanto en las viviendas más pobres como en las que tienen mayores ingresos, en éstas últimas el gasto en bebidas rebasa a otros productos alimenticios básicos como los cereales y las tortillas de maíz, así como las verduras y legumbres.
Las proteínas de origen animal como la carne de res, de puerco, de aves, pescados y mariscos, huevos y leche son la mayor carga económica para los hogares en el país en materia de alimentos y bebidas ya que casi el 40 por ciento de los gastos destinados a este rubro se destinan a este tipo de productos.
Aunque también hay diferencias entre los hogares con menos ingresos, incluidos en el llamado decil I, y los más ricos que son los del decil X. En el primer grupo se destina a productos de origen animal un 33 por ciento del total de los gastos y en el segundo el porcentaje rebasa el 40.
A estos productos le siguen las calorías, carbohidratos y grasas, que incluyen cereales, tortillas de maíz, tubérculos, aceites, azúcares y bebidas no alcohólicas.
En promedio este grupo de alimentos representa un 29.9 por ciento de los gastos totales y la proporción al analizarlo por deciles es la contraria a las carnes y pescados pues en los hogares del decil I este gasto se acerca al 40 por ciento y en los del decil X es del 23 por ciento.
Otra diferencia que se aprecia en el desglose de gastos en el rubro de alimentos y bebidas está en la cantidad de dinero que se destina a comidas fuera de la vivienda. Mientras que en los hogares más pobres el porcentaje es mínimo, de menos del 10, en los más ricos el porcentaje es del 40.
