Existe un hartazgo ciudadano generalizado respecto al cúmulo de conflictos que aparecen por todas partes; no creo que exista tanta ausencia de liderazgo para promover el equilibrio social y la paz. Es muy lamentable ser testigo de la profunda descomposición social, pues igual aparece un convoy armado en Zamora, Mich., retando a la autoridad y al estado de Derecho, que de la misma forma asesinan a un joven cajero de tienda de conveniencia en Manzanillo, Col., cuando estaba hincado, desarmado y de forma cobarde le disparan por la espalda cuando ya tenían el botín, también no cesan los ejecutados, descuartizados, secuestrados y, hasta en las calles, cualquier hijo de vecino actúa prepotente contra otros, al fin que no pasa nada, incluso, hasta individuos ruidosos que rentan sus llamadas quintas como la del Bom bom en Guadalupe, Zac., en donde están autorizados para terminar la fiesta a las 8 o 9 de mañana del día siguiente, con volumen a todo lo que da, tamborazos, bandas en vivo, karaoke con pésimos cantantes que ladran toda la noche violentando el descanso y la tranquilidad de los vecinos. Todo esto y más, son muestra clara del descontrol social que hay, de la nula aplicación de la Ley y de la imposición de la barbarie. No hay un líder que oriente al país, no hay estatistas que construyan alternativas de armonía ciudadana, estamos pagando la factura de haber permitido tantos agravios del PRI y del PAN, de haber solapado tantas ratas y corruptos cuyos hijos, ahora dañan a la sociedad desde diversas esferas. Peor aún, ahora que MORENA llegó al poder, la estrategia es sembrar más cadáveres por todo el territorio para demostrar al electorado el fracaso de la izquierda, lo malo es que Alfonso Durazo Montaño (Hijo putativo de Luis Donaldo Colosio) ha sido incapaz de formalizar una estrategia de seguridad que oriente los destinos de México, por el contrario, ha sido más exitosa la campaña negra de la oposición así que tendremos un sexenio que no lucirá y unos lucidos que con tal de opacar la gestión de López Obrador, son capaces de elevar los niveles de inseguridad hasta que después de mucho, la gente diga: estábamos mejor con el PRI. Creo que esa es la apuesta, no los intereses de la Nación, sino los intereses de grupo y de partido, valiendo madre la sociedad y todos los muertitos que haya que colgarle al sexenio, así que Usted y yo, tendremos mucho más de inseguridad hasta que nos vendan al nuevo mesías que terminará como arte de magia, con tanto agravio a la población. En este contexto, es urgente, muy urgente que los principales actores de la Cuarta Transformación despierten y no solamente los de orden federal, también los locales pues tal parece ser que el empeño que tienen es la promoción personal para las siguientes posiciones políticas, gastando muchos millones en imagen más que en obras efectivas a favor de la gente; en otros tiempos por ejemplo, en el ámbito municipal el primer año se aprendía, el segundo se trabajaba y el tercero era para dejar al nuevo sucesor y ver para donde le seguían, ahora, desde el primer año andan en joda viendo quien es el mejor gallo para gubernatura, diputaciones o reelección. En el escenario federal, los asesores del Presidente deber ser más agudos y no permitir tantas tonterías como esa de los millones de años en donde teníamos imprenta y otras modernidades de la antigüedad. Pésele a quien le pese, la oposición escala peldaños en la meta de desprestigiar a la actual gestión presidencial, así que llegó la hora de chingarle antes de que la 4T se extinga antes de empezar y, aquí, una de las cosas principales es poner un alto a la violencia, construir una gran estrategia en materia de seguridad, reconstruir el tejido social, educar al pueblo y poner las cartas sobre la mesa. La inseguridad a la larga, nos perjudica a todos, un país dividido es potencialmente atractivo para los extranjeros que gustan de saquear los recursos naturales de nuestro territorio, como los canadienses y sus mineras o los chinos y su invasión del mercado. México, es un país grande que puede colapsar por tanta estupidez, tanto tropiezo gubernamental y, a tan pocos meses de haber iniciado, la 4T deja en entredicho, tantas esperanzas de un cambio y de acciones efectivas por lo que si no se actúa de otra manera, estaremos lamentando que perdimos la gran oportunidad de construir una nueva República.
*Integrante del Consejo Mundial para la
Defensa de los Derechos Humanos
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