Empezaré escribiendo mis primeras líneas del 2019 dando mi humilde y respetuosa opinión respecto al Ejercito Zapatista Liberación Nacional (EZLN); más que una opinión hacia el grupo ideario en mención, es una crítica a su más reciente posicionamiento contra lo que millones de mexicanos ya adoptaron como La Cuarta Transformación. Dejo en claro, que el EZLN siempre será para mí, una fuente de ideales que inspiran a la lucha por las minorías y los desprotegidos; su lucha fue temeraria, retaron al orden establecido; fue un grupo de indígenas que alzó la voz de la manera más radical y retadora contra un régimen opresor, manipulador y asesino; son un ejemplo de resistencia, pues su forma de organización aún existe. En la historia de las luchas sociales, de los momentos más radicales de nuestro país y de la defensa por la tierra madre, se le tendrá que hacer honor al EZLN, su valentía es innegable, pero… ¿Qué queda de los Zapatistas? ¿Su lucha? ¿Su organización? ¿La posibilidad de hacer crecer su movimiento? ¿Obtener más victorias? Definitivamente la lucha de los Zapatistas ya no es real, no porque ya no exista, claro que falta mucho que hacer por las comunidades indígenas y la tierra madre, pero el EZLN con su radical actitud en contra de todo lo que no está bajo su organización y por su aislamiento, no ha logrado ni logrará permanecer en una lucha real, en una lucha que sume victorias, victorias sociales, logros para toda la colectividad (que es lo que un auténtico movimiento social busca) y no solo para quien viva bajo el régimen Zapatista. La forma de organización Zapatista, esa sí continuará, y seguirá siendo un ejemplo de resistencia hasta que el ultimo caracol desaparezca, pero, solo permanecerá en sus centros de población, en 25 años de existencia su forma de organización no ha trascendido más allá de sus fronteras, por ende, su movimiento no crece. Habrá victorias en pro a la comunidad indígena, pero no serán producto del EZLN, serán victorias logradas gracias a un despertar de conciencias, donde los protagonistas serán millones de ciudadanas y ciudadanos, tal vez los comandantes del EZLN se sienten solo espectadores de los grandes cambios que ocurrirán y por eso arremeten en contra de lo que más del 70% de los mexicanos ven como una esperanza de cambio. El posicionamiento que emitieron los líderes del EZLN en su pasado 25 aniversario respecto a no permitir que se lleve a cabo el proyecto del Tren Maya y sus comentarios de rechazo al Gobierno de AMLO, creo que atiende solamente a una estrategia mediática, así como todos los demás posicionamientos que ha tenido el EZLN en los últimos años, se trata solamente de robar cámara. Disentir es su derecho y es una estrategia que no está mal, si el único fin es mediático, pero ojalá y no caigan en una confrontación que de antemano perderán socialmente…
Por lo regular, siempre abordo un solo tema en este espacio de opinión, pero en esta ocasión saldré de lo ordinario… el 2019 nos recibe con gran optimismo en muchos temas; para empezar, a la oposición y a la prensa fifí como diría AMLO, se les fue de la mano sus discursos y primeras planas hablando de gasolinazos, de inflación, de elevación de precios; los mexicanos estamos acostumbrados a que cada primero de enero vivismos el alza de productos y servicios, lo que se conoce como la cuesta de enero; en este año el temor no fue menor, aunado a lo que estábamos acostumbrados a que ocurriera, también teníamos el discurso de la oposición “advirtiendo” que para entrar el año viviríamos la inflación, la devaluación del peso y el gasolinazo; para la sorpresa de muchos, nada de eso ocurrió. El año nuevo nos recibe con baja a la gasolina en algunas partes del país; con aumento al salario mínimo, el más importante en 25 años; sin la elevación de precios y servicios (salvo que algún comerciante o empresario se quiera pasar de listo). Si así empezamos el año ya quisiera ver los cambios que habrán más adelante, hay optimismo y voluntad de parte de ciudadanía y gobierno…
Otro tema de relevancia que se dio iniciando el año, precisamente el día de ayer, fue la elección del nuevo ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, será muy interesante sus próximas declaraciones, además de sus responsabilidades y sus facultades que le fueron conferidas como el de la impartición de justicia de una manera equitativa, el respeto a la legalidad y a la división de poderes, el nuevo presidente de la SCJN tiene sobre sus hombros temas muy delicados, temas que la sociedad ya hizo suyos como el derroche, la corrupción y nepotismo del Poder Judicial. Espero que el nuevo ministro atienda las exigencias de la sociedad y que pase a la historia como impulsor de una trasformación dentro del Poder Judicial. Me despido de apreciable lector (a), deseándole un feliz año nuevo y enviándole mis mejores deseos para usted y su familia. ■
