Ciudad de México. La operación simultánea de los aeropuertos de la Ciudad de México y Santa Cecilia “es imposible, no es viable”, expuso el secretario de Comunicaciones y Transportes del gobierno federal, Gerardo Ruiz Esparza. Desde la tribuna de la Cámara de Diputados, insistió en que el costo de cancelar la obra del Nuevo Aeropuerto Internacional de México, sería de 60 mil millones de pesos, y 40 mil más por costo de insumos.
El funcionario adujo que la construcción NAICM “avanza”, en esa obra se han invertido 100 mil millones de pesos, se han contratado 175 mil millones, y se cuenta con recursos para cubrir las necesidades financieras en lo que resta del 2018, en 2019 y el primer semestre de 2020, defendió.
En coincidencia con el inicio de la consulta convocada por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, con objeto de definir la postura de su administración en la materia, el funcionario federal quien acudió a San Lázaro para cumplir con la glosa del sexto informe de gobierno de Enrique Peña Nieto, enfocó su intervención de apertura en defender la obra en Texcoco, los trenes de Toluca-Ciudad de México y el de Guadalajara.
El mexiquense, también expuso que el socavón en la autopista México-Acapulco, fue resuelto y los familiares de las dos víctimas fueron objeto de resarcimiento
Ruiz Esparza, quien por su postura en torno a la terminal aérea en construcción fue objeto de la repulsa de los diputados de Morena y del Partido del Trabajo, colocó sobre la mesa el Pograma Nacional de Infraestructura 2013-2018 (PNI) que vino a resolver, dijo, grandes problemas en materia de infraestructura.
Al inicio de la presente administración “el sector de comunicaciones y transportes registraba una importante saturación en los subsectores portuario, aeroportuario, en múltiples autopistas y carreteras. Asimismo, se observaba un bajo desarrollo de los sectores ferroviario y aeronáutico, con 10 aerolíneas que habían quebrado en años anteriores, así como un rezago en telecomunicaciones que limitaba la competencia, la libre concurrencia y generaba altos costos de servicio, muy limitada cobertura y calidad. Estas saturaciones y rezagos contribuían a frenar el desarrollo nacional.”
Así se concentró en el NAICM al que defendió puntualmente, incluso colocando al frente los argumentos de la OCDE, organización multinacional que respalda la obra a través de José Angel Gurría, y cuyas opiniones son consideradas de notable peso en la actual administración. Los argumentos del funcionario se concentraron en cifras y números:
“El NAICM tendrá capacidad para atender en su primera etapa hasta 70 millones de pasajeros y en su capacidad máxima serán 125 millones. En el NAICM trabajan 307 empresas, de las cuales 90 por ciento son mexicanas que aportan beneficios sociales como la generación de más de 45 mil empleos con una proyección de 60 mil al término del año y se ha beneficiado de manera directa a 17 mil personas a través del Programa de Empleo Temporal. Se calcula que en toda la etapa de construcción se generarán un total de 160 mil empleos y en su máxima etapa de operación 450 mil.”
También, convencido de sus argumentos, el secretario recordó que la obra se realiza bajo el esquema de Contrataciones Abiertas, modelo promovido por el Banco Mundial para transparentar la información en todas las etapas del proyecto y con observadores permanentes de la OCDE y la Secretaría de la Función Pública (SFP).
“El día de antier, el Secretario General de la OCDE, Licenciado José Ángel Gurría, entregó el Tercer Informe de Avances sobre el NAIM, documento que destaca innovadoras y buenas prácticas que colocan al Grupo Aeroportuario a la vanguardia de la Administración Pública, en la aplicación del estándar de datos para las contrataciones abiertas.”.
