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jueves, 18 abril, 2024
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Una “ciudadanía viva” será la que frene tentación de diputados de revivir herramientas legislativas

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Por: ALMA RÍOS •

■ Cuestionable, el incremento de viáticos y de gastos de representación: Medina

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Gilberto del Real Ruedas, presidente del Consejo Estatal del Movimiento de Regeneración Nacional, y Luis Medina Lizalde, ex líder de la bancada partidista de este instituto político en la 62 Legislatura y quien impulsó la modificación a la Constitución del estado que prohíbe el ejercicio de recursos para programas sociales por parte del Poder Legislativo (donde se insertaban las denominadas “herramientas legislativas”), coincidieron en entrevistas por separado en señalar que será una “ciudadanía viva”, la presión social, la vigilancia ciudadana, la que conculque la tentación de los legisladores de revivir partidas presupuestales que pueden ser objeto de su ejercicio discrecional y por tanto de corrupción.

Del Real Ruedas incluso habló de que en caso de manifestarse el avance de una voluntad en este sentido desde los diputados morenistas, que propuso como una regresión grave y una tropelía, implicaría la necesidad de iniciar procesos ante la Comisión de Honestidad y Justicia del partido a nivel nacional, porque “estaría absolutamente en contra de la visión de Morena en torno al asunto del gasto público”.

Por su parte, Luis Medina Lizalde explicó que lo que se interpretó como “el regreso de las herramientas legislativas” fue el traslado del capítulo 4000 a los 3000 y 1000, respectivamente.

Un traslado que consideró lógico y derivado de la modificación a la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Zacatecas que anuló la posibilidad del ejercicio de este tipo de recursos para el Poder Legislativo.

Lo que significa es que el remanente de los recursos de las herramientas legislativas presupuestadas para este 2018 se dirigieron a servicios generales, 12 millones de pesos, “o sea capítulo 3000”, y 6 millones, a capítulo 1000, que es el de salarios y prestaciones.

Sobre estos últimos refirió, “hasta donde se ha aclarado por el presidente de la Comisión de Planeación Patrimonio y Finanzas (PPF), existe la necesidad de crear un fondo de finiquito para prescindir de personal”

Algo que consideró una buena medida “si se hace con reglas objetivas”, ya que la nómina en la Legislatura del estado fue inflándose “con influyentismo” pero también observó, cabe la posibilidad de que sea el mismo influyentismo el que determine que se liquide a algunos trabajadores “exclusivamente por razones sectarias”.

Enfatizó por su importancia en esta coyuntura, el vínculo de este tema con la contratación de asesores para los legisladores, que dijo, está “suelto, no tiene ninguna regulación” ni supervisión, por lo que es campo propicio “para los aviadores, para inflar la nómina”.

Por ello Luis Medina Lizalde consideró la medida que tomaron los diputados como necesaria pero precipitada, ya que fue leía “como un esfuerzo por apropiarse de fondos públicos en su beneficio”.

A la observación agregó el comentario no obstante, de que “lo que sí verdaderamente es cuestionable, es el incremento de viáticos y de gastos de representación”, ya que son justamente este tipo de medidas las que “están siendo muy cuestionadas -por la ciudadanía -. Yo espero que la reacción social sensibilice; creo que los más inteligentes diputados van a leer el ánimo social que hay, y van a entender que es muy importante dejar de resistir la lógica de la austeridad republicana que llegó para quedarse”.

Sobre la posibilidad de que quieran revivirse partidas presupuestales para el 2019 que puedan ser objeto de ejercicio discrecional y opaco, como lo fueron las herramientas legislativas, comentó que “hay mentalidades, hay diputados que han expresado de diversos modos su interés en restaurarlas”, pero no son la mayoría.

Dijo que quienes votaron estas modificaciones que incluyeron el traslado de recursos del capítulo 4000 al 1000 y 3000 y el incremento a viáticos y gastos de representación, “se enfrentó con un hecho consumado, votaron un acuerdo de urgente y obvia resolución de cuyo contenido no conocieron previamente los alcances”.

“Conozco el sentir de gente que no tenía la comprensión de lo que estaba votando en ese momento, pero cuyos valores no van en esa dirección, de abusar”.

Sobre la resistencia que existe en el interior del propio partido Morena al tema de la austeridad republicana y la no corrupción, observó, que las fuerzas que conquistaron la victoria el pasado primero de julio, constituyen “una base social amplia, diversa y contradictoria”, en donde hay gente que efectivamente se está resistiendo a la austeridad, “los más peligrosos son los encubiertos que Morena tiene en todo el país, los que públicamente enarbolan el discurso pero lo torpedean cada vez que pueden, eso se da en todo el país”.

Sobre el mismo tema Gilberto del Real Ruedas adelantó que habrá resistencias, “muchas más de las que hemos visto”, pero la posibilidad de conculcarlas estará en “qué tanto sacudió conciencias” de la ciudadanía la elección del pasado primero de julio, “porque no es tarea nada mas de Morena. Aun Morena tiene blandengueos y flaquezas que ya se están viendo; el tirón fuerte para que eso se mantenga –la decisión del no a la corrupción y el sí a la austeridad- lo tendrá que dar la ciudadanía organizada, con y sin Morena”, agregó.

Ambos políticos coincidieron en el punto de que “lo que va a conjurar la posibilidad de que ellos se impongan –los funcionarios públicos y representantes populares que buscan acceder a recursos de ejercicio discrecional y opaco- es la vigilancia de la sociedad, es la participación de la sociedad, dijo Luis Medina, quien agregó, “bienvenida la presión social, bienvenida la vigilancia ciudadana, creo que este episodio revela que la sociedad no va a permitir que regresen las herramientas legislativas, va a estar muy pendiente de eso en esta ocasión”.

Encuentra el ex diputado que hay una sociedad civil en Zacatecas que todavía “no tiene contornos ni rostro definidos, pero que ya se expresa con mucho vigor. Y eso es una buena noticia para todos, cada paso de una figura pública tiene que ser explicado”.

Gilberto del Real por su parte trajo a colación una iniciativa publicada en La Jornada que hablaba de la necesidad de crear observatorios ciudadanos, agrupamientos de seguimiento para todas las dependencias, y “marcaje personal hasta para cada diputado en particular, ciudadanía viva”.

Habló aquí del Instituto Nacional de Formación Política de Morena, que implicará un fuerte avance hacia adentro del partido en este sentido, pero que no se acotará a él sino que “tiene que ayudarnos toda la ciudadanía para echarle para adelante”.

El presidente del Consejo Estatal de Morena observó asimismo que “no hay movimiento de gran transformación que vaya a ser lineal. No hay para qué asustarse, pero sí para que preocuparse y ocuparse”, expuso.

El funcionario partidista también reiteró las posibilidad de que el asunto ya con la manifestación dada, sea llevado al órgano disciplinario nacional del Movimiento de Regeneración Nacional, “mínimamente una alerta” informada a la Comisión de Honestidad y Justicia del partido.

Y en coincidencia con Gerardo Espinoza, quien incluso hablaba de figuras como el juicio político y revocación del mandato, agregó que la primera opción podría iniciarse pero ante la Cámara federal, y para la otra sería deseable que se pudiera acceder rápidamente.

Luis Medina Lizalde consideró importante también que la gente valore el cambio que se produjo con la reforma a la Constitución local, pues acotó, “no nada más se eliminaron las herramientas legislativas, se eliminó el secretismo; están prohibidas las sesiones privadas por lo que solo tendrán validez jurídica los acuerdos que se documenten.

“Tiene que haber actas en donde quede muy clara la postura de cada uno de los participantes” y estos documentos tienen que ser públicos.

“Ya se estableció en la reforma el principio del Parlamento abierto, no hay ningún pretexto para ocultar información. Y esa es un arma que tendrá la sociedad para que el Poder legislativo tenga un desenvolvimiento verdaderamente republicano y austero”.

Adelantó que la 63 Legislatura en principio “va a tener una gran oportunidad, la de concentrarse en las actividades propias del Poder legislativo. Ya no va a andar en la política clientelar tan distractora, tan consumidora de tiempo, y tan inútil inclusive para el que la practica”.

Dijo que “hay muchos derrotados que se la pasaron todo el tiempo repartiendo despensas y no les sirvió. Eso creo que es muy importante que lo tengamos muy claro, la sociedad ya hizo suyos los cambios. Ya aprendió lo de la austeridad republicana. Es algo muy sentido no solamente entre Morena, las bases de todos los partidos están pidiéndole lo mismo a todos. No es algo partidista, es un sentimiento colectivo generalizado”.

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