La opulencia de Miguel Alonso: las propiedades, el derroche y la opacidad”, es un reportaje publicado por Andrés Vera Díaz en www.periometro.com, el cual fue enviado el lunes 25 de abril a mi cuenta de correo electrónico.
Andrés Vera Díaz abre a partir de su investigación, información que deja a los zacatecanos pasmados. Refiere algunas de las propiedades que el aún gobernador ha hecho suyas en tan sólo cinco años de este sexenio que declina, de las inversiones cuantiosas que dieron plusvalía a los inmuebles adquiridos y del nepotismo que aumenta los niveles de corrupción por la conducta ilícita del hermano Juan.
El próximo septiembre habrán transcurrido seis años en que Miguel Alonso asumió el cargo de gobernador y también seis en que promovió ante la Legislatura la iniciativa anticorrupción “Tribunal de Cuentas”. De resultar ciertas las investigaciones de Vera Díaz y lo que agrega la “Vox Populi” sobre las adquisiciones en la calle Fernando Villalpando esquina con plazuela de Santo Domingo del Centro Histórico de la capital, entonces entenderemos los motivos de Alonso para bloquear su propia iniciativa, en lo que bien podría llamarse la crónica de un saqueo anunciado.
Entenderemos también las razones éticas de la renuncia del Ingeniero Esaú Hernández al cargo de secretario general de Gobierno.
Y será motivo de interpretación aparte sobre el distanciamiento de Pedro Inguanzo Varela, empresario que apoyó incondicionalmente y acompañó en diversidad de eventos públicos al gobernador Alonso. Amistad que derivó al nombramiento del hijo de Inguanzo Varela como secretario de Turismo del Estado.
La incorporación de Inguanzo Varela al Partido Morena, en apoyo al candidato David Monreal, podría resultar de obvia explicación en tiempos de oportunismo político si se dejara hasta aquí; sin embargo, la denuncia que hace el empresario hotelero en el sentido de que, “tanto él (Alonso), como su hermano (Juan) se encargaron de llenar de corrupción al Estado”, puede caer en la lógica de la denuncia sincera como una obligación moral ciudadana, o de la denuncia interesada para agradar a su nuevo candidato o, inclusive, de la denuncia por agradecimiento de favores recibidos en el pasado reciente.
El jueves 28 pasado los zacatecanos llevamos otra sorpresa: se comenta en la columna “La Jiribilla”, de La Jornada local, información del priísmo en el sentido de que a Pedro Inguanzo, “el cerro sobre el que se levanta su hotel principal se lo donó nada menos que Ricardo Monreal” (28 IV 16). Lo que los zacatecanos recordamos es que en ese lugar se encontraban las instalaciones de Protección Civil.
Entenderemos también los motivos de Alonso para estimular hace dos meses en la actual Legislatura el “perdón” de desviaciones y faltantes de varios diputados que antes fungieron como alcaldes, y que suman varios miles de millones de pesos, bajo el argumento de la falta de firma en la Ley de Responsabilidad de Servidores Públicos del Estado y Municipios, defensa que utilizó la ex gobernadora para ganar impunidad.
De esta manera Alonso les perdona el adeudo millonario a través de sus diputados, al tiempo que los hizo copartícipes de corrupción.
Entenderemos también por qué, si desde hace más de cuatro años fue detectada la irregularidad de la falta de firma en la Ley de Responsabilidades y que dio lugar a la exoneración de Amalia, a la fecha sigue sin ser abrogada la ley declarada nula por el Poder Judicial de la Federación y los diputados no han procedido a crear la normatividad adecuada y necesaria para castigar a los servidores públicos venales.
Recientemente, la Secretaría de Hacienda publicó los datos “actualizados del nivel de deuda de las entidades federativas al cierre del año pasado. Zacatecas ocupó el “lugar décimo con una deuda que representó 92.7 por ciento de sus participaciones y obligaciones por 7 mil 609 millones de pesos”. (El Financiero. 28 IV 16)
Sin embargo, Miguel Alonso, al asistir esta semana al evento en la Ciudad de México, en el que Enrique Peña Nieto firmó la Promulgación de la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios, comentó que “En Zacatecas la administración pública se ha adaptado y ha cumplido a cabalidad los lineamientos de la Ley Federal de Contabilidad Gubernamental promulgada en 2009, lo que ha abonado al saneamiento de las finanzas públicas de la entidad”. (La Jornada 28 IV 16). ■
