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jueves, 28 marzo, 2024
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Mariguana y cocaína, se usan cada vez más como primeras drogas entre adolescentes

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Por: ALMA RÍOS •

■ Exponen mediante estudio motivaciones de los bachilleres zacatecanos para fumar y beber alcohol

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■ Anualmente mueren 2.5 millones de jóvenes mexicanos por causas asociadas al consumo, informan

En este momento el alcohol y el tabaco se han vuelto drogas secundarias para los jóvenes zacatecanos, quienes están utilizando cada vez más como drogas de inicio, la mariguana y la cocaína, expuso Maricruz Vidales Jara, docente e investigadora de la Unidad Académica de Enfermería de la Universidad Autónoma de Zacatecas.

Vidales Jara dio voz a parte de la investigación que conjuntamente con Luz María Delgadillo Legaspi y María Guadalupe Gallegos, han realizado como parte de una colaboración con el Centro Estatal de las Adicciones de Zacatecas (Cecaz), y que fue expuesta  en la mesa Políticas de salud del Congreso Latinoamericano de Ciencias Sociales Reestructuración y vigencia del modelo neoliberal en América Latina.

El estudio Motivos para el consumo de alcohol y tabaco en estudiantes de bachillerato fue apoyado por los Servicios de Salud de Zacatecas (SSZ) y deriva, precisó, de uno mayor relativo al uso de drogas lícitas e ilícitas. Los datos en que se sustenta fueron recuperados el pasado 2014.

En la aplicación de cuestionarios a mil 259 estudiantes, tomados como muestra de un universo de 10 mil 814 pupilos inscritos al nivel medio superior en todo el estado de entre 15 a 18 años, se obtuvieron además de la información dada a conocer ayer, datos acerca del consumo de “un sinfín de sustancias, que incluso nosotros no las hemos escuchado”, expuso.

La media de edad de quienes respondieron a una serie de tres cuestionarios para arrojar información sobre la prevalencia en el consumo de estas drogas lícitas, la motivación que tienen para ingerirlas y su distribución por sexo, fue de 16.4 años.

En el caso del alcohol, la edad de inicio se ubicó en los 14.4 años y para el tabaco, expuso, en 14.6. Las cifras, dijo la investigadora, se encuentran “muy por debajo de la media nacional” que arrojó la Encuesta Nacional de Adicciones de 2011, misma que señala la edad promedio para el inicio en el consumo de estas sustancias en los 20.4 años.

La edad más temprana en que los jóvenes zacatecanos comenzaron su consumo de enervantes legales fue de 6 años y la máxima se ubicó en los 18, también dijo.

Maricruz Vidales, agregó, los bachilleres ingieren en “un día típico” desde 4.54 bebidas, regularmente cerveza por ser la de más fácil acceso, a 36, y en el caso de los cigarros, pueden fumarse mínimo uno al día pero llegar a consumir hasta 60, esto es, tres cajetillas diarias.

La investigación fue enmarcada en la tesis de los investigadores Cox y Klinger (1988), que propone al consumo de drogas como un medio para obtener “ciertos resultados valiosos”. Este modelo, precisó Vidales Jara, señala que las motivaciones del consumidor de drogas son “regularmente sociales”, esto es, atienden a un contexto familiar o núcleo social absorbente.

Los jóvenes encuestados expusieron como primer motivo para consumir alcohol, el que les ayuda a “manejar problemas”.

16.4 de ellos dijo encontrar ese auxilio cuando se sienten tristes o deprimidos. No obstante señaló la expositora, la sustancia es un depresor del sistema nervioso central por lo que hay falta de conciencia de este sector de la población que aun cuando se provoque en un inicio la euforia por el consumo a la postre, “los va a deprimir más”.

El otro apartado, “conformidad”, arrojó que 4.2 por ciento de los adolescentes consume siempre o casi siempre porque “sus amigos los presionan para consumir”. En este caso la motivación se encuentra asociada a su necesidad de pertenencia a un grupo, dijo.

Quienes encuentran razones para beber siempre o casi siempre “porque sienten que no los incluyen sus amigos o compañeros”, son alrededor de 3.9 por ciento de los jóvenes, también comentó.

Pero es 33 por ciento de ellos quienes señalaron la necesidad del consumo de alcohol para poder celebrar una ocasión especial con sus amigos, pues dijeron, la sustancia las hace más “amenas o motivantes”.  Mientras que otro 21.5 expuso que “sin alcohol no hay es fiesta” y 19.9 por ciento de ellos argumentó que tiene que consumirlo para poder disfrutarlas.

El estudio expuso asimismo que 19.8 por ciento de los encuestados dijo que siempre o casi siempre consumen alcohol porque “es divertido” y 13.9 porque encuentra la experiencia “emocionante”.

En el caso del tabaco, 23 por ciento de los adolescentes dijo sentirse relajados al fumar luego de un estado de tensión y 16 por ciento expresó sentirse casi siempre frustrado cuando hay impedimento para hacerlo, en tanto que 8.5 por ciento de ellos, expresó que lo que más disfruta, “es cuando prende el cigarro”, lo que expresa ya una dependencia, dijo.

Otros de quienes respondieron estos instrumentos de investigación señalaron que se sienten más atractivos con el sexo opuesto cuando fuman, alrededor de 4 por ciento. Pero casi 10 por ciento se define ya como adicto al cigarro. Y 7.5 de quienes fuman aun sabiendo que les causa problemas de salud ya experimentados, “no lo piensan dejar”.

En el país los consumos de alcohol y tabaco por adolescentes están actualmente situados como un problema de salud pública que implica un “enorme costo social”, comentó. Anualmente mueren 2.5 millones de jóvenes mexicanos por causas asociadas a ellos.

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