UNO: Nuevo pleito entre políticos no ayudará a zacatecanos
DOS: Sin atención, comunidades de Fresnillo destrozadas por lluvias
TRES: Nerviosos, consejeros electorales designados
COLOFON: Jerez, indefenso ante robos
En medio de un sistema político putrefacto como el mexicano, ya no asombran pleitos como el de José Bonilla y Ricardo Monreal.
Más de lo mismo.
Los casos de enriquecimiento inexplicable parecen darse todos los días, pero lo más inexplicable es cómo los políticos, salvo honrosas excepciones, no se denuncian entre ellos hasta que salen de pleito.
No te piso la cola para que no me pises la mía.
Vivimos en el país de la impunidad.
Aquí en Zacatecas, recuérdese, se ventilan audios incriminatorios pero nada sucede.
No hay delitos, no hay culpables.
Lo peor es que en medio de estos pleitos tan baratos como indignantes no se juega lo importante.
¿Acaso el debate entre los Bonilla y los Monreal es sobre las próximas reformas?
¿Acaso es sobre cómo mejorar la precaria economía de las familias zacatecanas?
Bah.
Parece que las prioridades de ambas partes son… sólo el chisme y la agresión.
DOS: “Mientras se pescan los bagres, comen juiles”
Sin ir más lejos, dos comunidades de Fresnillo, Mariana y Cieneguitas de Mariana, siguen abandonadas por las autoridades.
Esto 60 días después de aquella noche en la que muchos habitantes perdieron todo.
Lo único que han tenido es promesas y promesas.
Las víctimas ya no saben a quién pedir ayuda.
TRES: “Cuando el río suena, agua lleva”
Se rumora en los pasillos de la sede de la Legislatura que al menos dos de los seis nuevos consejeros electorales están muy nerviosos.
Sienten que la pierden cuando apenas empezaban a saborearla.
En efecto, tanto el militante perredista Felipe Andrade como el superbecario panista Joel Arce andan al tiempo temerosos y enojados.
No los calienta el sol.
Saben que las demandas en contra de su elección como consejeros pueden prosperar.
Entonces se daría marcha atrás a sus posiciones de privilegios, a cambio de seguir sirviendo a los intereses de sendos partidos.
Incluso dicen que ellos, Andrade y Arce, son los primeros convencidos de que no deben ocupar esa posición.
¿Será cierto?
COLOFON: “En casa del jabonero, el que no cae resbala”
Allá en Jerez, muchos ciudadanos no encuentran la puerta.
La de su seguridad familiar.
De unos meses para acá han aumentado bastante los robos a casas y automóviles.
Y los policías municipales parecen mero adorno, denuncian los vecinos.
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