■ Expuso en Mallnitzer Symposium für moderne Kunst el mes pasado, junto a 31 creadores del orbe
Luego de haber viajado a Francia, España, Eslovaquia, India y Estados Unidos, donde ha dado a conocer su arte, así como donde ha alimentado su creación, la artista zacatecana Georgina Gómez, quien tiene una trayectoria de más de 20 años como pintora, y desde hace poco en otras ramas de la plástica, fue elegida como la única representante de México para participar en Mallnitzer Symposium für moderne Kunst, una estancia internacional de pintura desarrollada en Mallnitz, municipio perteneciente a Carinthia, en Austria.
La creadora recientemente regresó a su tierra natal, después de haber visitado aquel país, donde estuvo del 3 al 17 de septiembre pasado, y donde convivió con otros 31 artistas –pintores, escultores e incluso un fotógrafo- de otros países, entre ellos India, Japón, Tailandia, Macedonia, Chile, Rumania, Hungría y, por supuesto, Austria.
En torno a lo que esta zacatecana destaca como una buena organización de parte de los anfitriones, los participantes se retroalimentaron entre sí, además de que, al conocer diversos lugares de ese municipio, entre los que destacan las montañas, cultivaron más elementos en sus piezas.
“Esta ha sido para mí una de las estancias mejor programadas y con mejores resultados”, expresó en entrevista, ante lo cual refirió que en ese periodo creó tres cuadros en acrílico, así como trabajos de pintura sobre papel algodón.
De los tres cuadros, uno ya forma parte del acervo de la galería donde expusieron los 32 artistas, ARTour Gallery, en Austria, mientras que los otros dos, titulados Otoño atípico y Viento en suspensión, lo serán de un espacio, también de exposición, en Bélgica. Ese primero, que fue exhibido junto a otras pinturas, así como con esculturas y fotografía –una pieza por cada expositor-, es producto de los recorridos a la montaña, por lo que la artista lo nombró Mallnitz, tierra mágica, pues ahí “todo está como encantado”.
Georgina Gómez fue invitada luego de que la gestora cultural -una doctora en artes originaria de Alemania- que organizó la actividad la encontró y valoró sus cuadros en Internet, específicamente en la red social de Facebook, y tras ello, en el buscador, hasta hallar más referencias. Así, la contactó.
“Siempre aprendemos de otras culturas y de otras latitudes que no nos imaginamos. Esta fue una reunión de artistas sin fronteras, en la que nos dieron mucha confianza de que nuestro trabajo es reconocido en otros lugares”, sostuvo la artista, y agregó que de este tipo de encuentros suelen surgir otros, de modo que en el caso de éste, ya está invitada a un festival de pintura en India, en marzo de 2014.
Asimismo, en primavera del mismo año participará en una exposición colectiva en Nueva York, y después, en otra estancia en Stuttgart, en Alemania, donde probablemente realizará escultura, dado que allá se produce mucha madera. Por otro lado, también expondrá de manera individual en el Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez, en el siguiente verano.
Ante esta confluencia de ideas con otros creadores, añadió: “la cultura para Austria, y para todos los países, es sumamente importante, porque es su identidad. Mis compañeros en esta estancia llevaron música de su país y la compartieron a los demás.
Eso cambia a una persona. Yo siempre pinto sola, con mi música, pero ahora lo hice junto a otros artistas y con su música. Fue una experiencia diferente. Después de estos viajes me siento renovada, con muchas ganas de mejorar, pues cuento ya con mayor riqueza mental y visual”.
Georgina Gómez dijo finalmente haber coincidido con otros de los participantes en lo que respecta a su arte; por ejemplo, con un rumano, aunque él utiliza mucho el dorado; con un chileno, quien, no obstante, opta en gran medida por el amarillo; con una japonesa, aunque ella pinta con colores muy suaves. Concluyó que se trata de “un lenguaje que dialoga entre muchos. Cada quien mostró su estilo y cada uno vio el arte de los demás. Fue otro nivel”.
