Río de Janeiro. Agitando carteles en los que se podía leer: «¡Saca tu cruz de mi útero!», unas mil personas protestaron el sábado a favor del aborto legal y del casamiento homosexual frente a cientos de miles de peregrinos católicos en la playa de Copacabana.
En la «marcha de las putas», como se autodenominan las manifestantes, participaron hombres vestidos de mujer y muchas mujeres sin camiseta, mostrando el sostén, de minifalda, shorts, tacones altos y lápiz labial color carmesí.
Millares de peregrinos que asistieron a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) los miraron sorprendidos y algunos opinaron en contra de que los protestantes rompían y tiraban crucifijos durante su recorrido.