11.5 C
Zacatecas
viernes, 29 marzo, 2024
spot_img

“El black metal es un sentimiento; no hay una explicación de por qué te gusta”: Iván, guitarrista de Hacavitz

Más Leídas

- Publicidad -

Por: ARACELI RODARTE SOLÓRZANO •

  • Hacavitz estuvo en Zacatecas el pasado 27 de diciembre, donde mostró su inclinación por el black metal, género que eligió luego de haber comenzado su carrera con death black
  • He crecido con las raíces del punk; ha sido y sigue siendo mi vida; pero la primera música que energéticamente me llamó fue el black metal, que, definitivamente, es una energía que no se compara con nada, agregó Iván en entrevista
  • La escena del black metal en México es de las más difíciles, “por lo que no creo que tal cual nos hayamos abierto camino en ella; de hecho, tocamos con bandas de punk, death metal y thrash”, y “creo que por eso hemos tenido la fortuna de estar en diferentes escenarios”
  • Recientemente, esta banda queretana enfocada a temáticas nihilistas y misantrópicas terminó de grabar 3 canciones que formarán parte de un álbum split que realizará con la banda española Spectrum Mortis y que se titulará Ad noctem
  • Asimismo, ya trabaja en su nuevo álbum, el cual podría ser dado a conocer a finales de este 2020 o a principios de 2021
  • Hacavitz, nombre tomado de un dios adorado por los mayas, ha combinado en sus letras el inglés, el español y el náhuatl

“El black metal es más un sentimiento; realmente, no hay una explicación de por qué te gusta. Es muy crudo; incluso, su música no es tan técnica, aunque, si la sabes hacer, puede serlo”. Sin embargo, lo que más destaca es su “ideología y esa energía que se transmite cuando haces determinadas atmósferas, como riffs oscuros, depresivos y con odio; no hay explicación tal cual, pero si sientes el black metal, lo haces o te gusta. No creo que sea para todos”.

- Publicidad -

Así lo dijo en entrevista exclusiva Iván Ochoa, guitarrista de Hacavitz, después del concierto que ofreció, por primera vez en Zacatecas, esta agrupación, el pasado 27 de diciembre, en un evento denominado Ritual de Solsticio de Invierno, realizado en el Foro Destroy, donde compartió escenario con las agrupaciones zacatecanas Satan Blood, Beast, Adramalek y Edipus.

Hacavitz, banda queretana fundada en 2003, tomó su nombre del de un dios adorado por los mayas; es también una agrupación que pasó de ser death black a black metal; sus temáticas son la misantropía y el nihilismo, y ha combinado en sus composiciones el inglés, el español y el náhuatl.

Actualmente, Hacavitz está integrada por Antimo Bounanno, en voz y guitarra, y único miembro fundador que se mantiene en la banda; César “Led” Sánchez, en batería, e Iván, este último quien ingresó a la banda en 2009. En sus cambios de alineación ha habido, como consecuencia, varias etapas en lo que respecta a sus composiciones y estilo.

Hasta ahora, cuenta con 12 materiales discográficos, de los cuales cinco son álbumes de estudio y se titulan Venganza (que fue el primero de su carrera, lanzado en 2005), Katun (del cual algunas letras están escritas en náhuatl combinado con inglés), Metztli obscura, Darkness beyond y Nex nihil; dos son EP y se llaman Hacavitz y Ojpanna (este último, en náhuatl); uno es un single y se denomina Lusting the dead of the night; tres son split y sus nombres son Apocalyptik blasphemy of the revolutionists, Rituals of the night y Hacavitz & Shit, y uno, de título Kauitl Palaktik, es una compilación.

Recientemente, Hacavitz terminó de grabar tres canciones -una de ellas titulada Sprung from Sacrilege, puesto que lanzará un álbum split intitulado Ad noctem, con una banda de Madrid, España, llamada Spectrum Mortis. Este cd está por salir; será editado en LP, en un vinilo de 12 pulgadas; se editará en México en versión digipack.

Asimismo, la agrupación ha estado de gira y promocionando su álbum más reciente, Nex nihil, lanzado en 2018. Además, ya trabaja en su nuevo álbum, el cual podría ser dado a conocer a finales de este 2020 o a principios de 2021.

Hacavitz, pues, ha combinado el inglés, el español en algunas canciones, y el náhuatl, este último porque desde su nombre, Hacavitz, se remite a esta lengua. Iván explicó que Hacavitz es una palabra compleja dentro de los mayas, pues es una entidad o un ser que tiene varios significados, aunque, concretamente, Hacavitz representa la muerte; es un dios de fuego mencionado en el Popul Vuh y adorado, sobre todo, por los mayas.

Antimo, quien escribe las letras y quien, junto con Iván, hace la música, eligió la palabra Hacavitz “porque a él le llamaban mucho la atención temas de la muerte, y en ese momento estaba muy clavado leyendo temas como el Popol Vuh; entonces, fue cuando se motivó a hacer la banda y ponerle ese nombre. Después, la banda cambió mucho porque algunas personas la catalogan más como prehispánica, pero no es así, pues eso sólo fue en un inicio y ni siquiera tanto, sino simplemente le dio un lugar a dicha historia; las letras siempre han sido más nihilistas, misantrópicas, de oscuridad”, explicó Iván.

En este tenor, Iván abundó que en sus temáticas, Hacavitz hablaba, antes, más de dioses, incluidos la sangre y el fuego, combinados con el nihilismo y la misantropía, y ahora es más de esto último. Es decir, el náhuatl y el maya fueron más temáticas del inicio de la banda, la cual, en palabras de Iván, fue evolucionando. Incluso, el estilo de ésta era death black y se fue transformando a black metal, de manera que cambiaron un poco las temáticas y las letras, más dedicadas ahora, como reiteró, a la misantropía, al nihilismo y a la destrucción.

Este paso de death black a black metal surgió, como ya se refirió, debido a las diferentes alineaciones. La primera alineación estaba más enfocada al death black, y a raíz de que entraron César e Iván, este último a quien le gusta mucho más el black metal, la banda tomó una sinergia diferente. “Ahora seguimos combinando un poco, pero pienso que la banda ya va un poco más enfocada al black metal”, sostuvo Iván.

Respecto a su inmersión personal en el black metal, Iván relató que “en realidad, soy más punk. Amo el punk; me gusta muchísimo. He crecido con las raíces del punk ochentero, después noventero, hasta hardcore (punk) de los noventas, pero la música que empecé a escuchar desde que tenía 12 o 13 años fue el black metal; fue la primera música que energéticamente me llamó, de la que me preguntaba por qué suena así, por qué es tan cruda, por qué no se entiende quizá por momentos. Eso me llamó mucho la atención. Desde niño escuchaba muchas bandas de black metal. El punk ha sido y sigue siendo mi vida; sigo teniendo algunos proyectos de punk, pero definitivamente el black metal es un sentimiento total, una energía que no se compara con nada”.

“El punk es brutal, porque, aparte de las letras, que es algo que se me hace increíble, la ideología, el tener conciencia en muchas cosas, el no ser agachado, el ser una persona que expresa y que no está de acuerdo en muchas cosas, la anarquía, la autosuficiencia, eso, para mí, es mi vida. Yo sigo siendo punk por más que toque black metal. Mi vida es en la onda del punk y seguirá siendo hasta el final de mis días”.

Algunas de las bandas que más le marcaron a Iván son Los Crudos, que tiene integrantes latinoamericanos; Tragedy; de la escena escandinava, Anti Cimex; mexicanas como Atoxxxico, “que es de las que iniciaron en México una escena y que en realidad fueron muy importantes para que existiera otro tipo de bandas; Histeria, y más”.

En tanto, de black metal, aunque Iván no recuerda con exactitud cuál fue la primera banda que escuchó, debido a su corta edad, sí recuerda que Darkthrone y Emperor fueron las primeras que conoció; “incluso, un amigo que era mayor que yo y que fue con la banda me enseñó todo lo que sé ahora y le estoy muy agradecido. Recuerdo que me regalaron el primer álbum oficial de Emperor, In the nightside eclipse. Estas dos bandas fueron, para mí, fundamentales. Obviamente, después escuché a Mayhem, Burzum y toda esa escena noruega. También escuché a bandas como Sarcófago”.

Detalló, respecto a Darkthrone y Emperor, que se les toma un cariño diferente. “He escuchado a muchas bandas ahora. Soy una persona que colecciona discos; me gasto todo mi dinero en eso. Libros y discos es lo único que tengo; soy adicto a ellos, y por ejemplo, Emperor, una de las bandas que más me marcó en su tiempo, hizo presencia hace poco en un festival mexicano, estuve tocando con ellos en Holanda con Hacavitz, por lo que tuve ese sentimiento de que después de tantos años, ahora he compartido con ellos y ha sido una sensación muy grata”.

En el sentido de su apego por los libros, a Iván le fascinan ciertos temas, como la psicología y los griegos y romanos, como Sócrates, Maquiavelo y Platón. “Ésa es mi escritura favorita, pero también me gustan novelas, Lovecraft, la ciencia ficción. No me encasillo. Me gusta siempre tener un libro a la mano, sobre todo en físico; me encanta oler ese libro viejo que a veces se consigue en un tianguis o en un lugar donde ya está casi reciclado”.

Hacavitz, que luego de Zacatecas estuvo en San Luis Potosí, es una banda muy activa, con presentaciones constantes en todo el país, además de fuera de México, visitando Europa, Canadá  y Colombia, país este último de donde acababa de regresar de una gira antes de estar en Zacatecas.

No obstante, Iván consideró que “el black metal en México es muy difícil. La escena es muy dura; a veces prejuiciosa, aunque hay otra que sí asiste para escuchar la música y a la que no le importan esos prejuicios. Yo sé, y para mí es fundamental hablar de cosas importantes, pero también creo que en esta escena hay mucho prejuicio. Creo que es de las más difíciles, por lo que no creo que tal cual nos hayamos abierto camino en ella; de hecho, tocamos con bandas de punk, death metal y thrash; no estamos encasillados; creo que por eso hemos tenido la fortuna de estar en diferentes escenarios”.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -