■ En México, este sector trabaja 30 horas más que los varones
“Según las Naciones Unidas, las mujeres representamos una gran porción de la fuerza laboral agrícola, en unos países más, en unos países menos”, expuso Luz Maclovia Haro Guanga, secretaria ejecutiva de la Red de Mujeres Rurales de Latinoamérica y el Caribe, en la conferencia magistral que se llevó a cabo en el segundo Foro del Día Internacional de la Mujer Rural, que se realizó el viernes 25 de octubre en la Casa Municipal de Cultura de Zacatecas.
Aseguró que hay 58 millones de mujeres viven en zonas rurales de América Latina y el Caribe, en tanto 17 millones son parte de la población económicamente activa.
En México, por ejemplo, las mujeres rurales trabajan 89 horas semanales, 30 horas más de jornada laboral respecto a los varones. Sin considerar que estas mujeres también cumplen con tareas domésticas.
La representante de la Red de Mujeres Rurales de Latinoamérica y el Caribe llamó a ser críticos con los roles que tanto hombres como mujeres realizan en el hogar, pues las tareas tradicionales obligan a las mujeres a trabajar en casa, y las necesidades económicas actuales a salir a laborar fuera. Es decir, las mujeres están desempeñando dobles jornadas que no son reconocidas ni económica ni socialmente.
Las mujeres contribuyen con el tema productivo y agropecuario, pues en el área de América Latina y el Caribe se producen el 45 por ciento de los alimentos del mundo y las mujeres rurales son las que abastecen los mercados locales.
Menos de 13 por ciento de las personas poseen tierras agrícolas o pasan a ser propietarias de las tierras y luego se convierten en jornaleras de las macroempresas, lo que repercute en la ausencia de la voz colectiva de las mujeres, bajo nivel de calidad de vida, imposibilidad de acceder a créditos por no ser propietarias.
Haro Guanga hizo alusión a prácticas culturales patriarcales que violentan los derechos humanos de las mujeres y las niñas, como los matrimonios concertados y por intercambio de bienes que al menos en América Latina sigue existiendo. Así como el embarazo precoz que pone en riesgo la vida e integridad de las mujeres del campo.
Para finalizar, la ponente internacional oriunda de Ecuador, llamó a las mujeres rurales a conocer sus derechos, porque una vez que hay un conocimiento de ellos, habrá como consecuencia un ejercicio y lucha constante para que se respeten.
Haro Guanga aplaudió que en el ayuntamiento de Zacatecas esté trabajando un departamento para la mujer rural. Sin embargo, no se sabe con cuánto presupuesto cuenta esta secretaría y si la Secretaría Municipal de las Mujeres Zacatecanas comparte recursos y objetivos.
