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viernes, 29 marzo, 2024
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Elección de Soralla Bañuelos de hace 3 años, a revisión entre Gobierno Federal y CNTE

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Por: MARTÍN CATALÁN LERMA •

■ El presidente Andrés Manuel López Obrador turnó el caso a Olga Sánchez Cordero

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■ Aseveran que la reconstrucción del SNTE es posible a partir de un amplio diálogo

 

La elección de Soralla Bañuelos de la Torre como secretaria general de la sección 34 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), hace tres años, es uno de los puntos que se revisan en la negociación que lleva a cabo la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y el Gobierno Federal.

Respecto a ese tema, el presidente Andrés Manuel López Obrador turnó el caso a Olga Sánchez Cordero, titular de la Secretaría de Gobernación, quien revisará lo ocurrido en el Congreso Extraordinario realizado en 2016, cuando personal de seguridad contratado por el propio SNTE, según lo ha declarado la propia secretaria general, “reventó” el evento con golpes contra los docentes participantes.

Ante esa situación, el Movimiento Democrático del Magisterio Zacatecano (MDMZ) acudió a la Legislatura del estado para entregar un documento en el que solicitan su intervención para reabrir la investigación de lo acontecido en dicho Congreso Extraordinario y reponer el proceso de elección de secretario general y el Comité Ejecutivo de la sección 34 del SNTE.

En el documento, la disidencia magisterial convoca a todos los trabajadores de la educación a que estén dispuestos para participar en la reconstrucción del sindicato, a fin de recuperar los derechos que se han perdido y corregir el rumbo gerencial que se ha impuesto al proyecto educativo mexicano en estas décadas de gobiernos neoliberales.

“Los traidores y fariseos que hoy enlodan la sección 34 están hechos para servir al patrón, por eso encendieron incienso a la reforma educativa, avalaron el despido de nuestros compañeros, aplaudieron la persecución laboral y se inclinaron ante la evaluación punitiva. Antes de convenir la desaparición de la plaza base habían aceptado la disminución del salario real, la anulación de derechos escalafonarios, la mutilación de las pensiones y la descalificación del magisterio nacional”, expone el documento.

Señalan que la reconstrucción del SNTE es posible a partir de un amplio diálogo, desde una discusión en la que participen trabajadores de la educación de diversas posiciones políticas, de distintas ideologías, con heterogéneas trayectorias pero con un propósito común: la defensa de los derechos de los trabajadores de la educación.

“Quienes coincidimos con ese objetivo ratificamos nuestro desconocimiento de la representación espuria que hace tres años se enquistó en la Sección 34 institucionalizando la violencia, por eso vamos a continuar realizando diversas acciones al tiempo que demandamos un nuevo Congreso Seccional para nombrar una dirección sindical legal y legítima”, concluye.

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