El prestigiado periodista Ricardo Rocha escribió en “El Universal”, la semana pasada, un artículo precisamente con el título “Refundar México”. El título y el contenido son de primera, como lo es todo lo que el reconocido periodista escribe. El título en lo particular me gustó, dice mucho y convence, por lo que le pido prestado a Ricardo Rocha ese concepto con la disculpa debida.
“Es un imperativo. Es absolutamente indispensable. Si queremos dejar de ser el país de las matanzas. Si aspiramos a darnos una opción de futuro. Si realmente deseamos preservar la nación.”
No es exagerado. La refundación es primordial. Hoy estamos viviendo una lección histórica que no podemos soslayar…,”dice el periodista.
El Presidente López Obrador está abriendo las entrañas del corrompido sistema político neoliberal con los riesgos que ello implica. Hasta que los mexicanos logramos llevar a Andrés Manuel a la Presidencia de la República, es que nos enteramos con la sorpresa inevitable:
Que el saqueo a Pemex se daba, más que por el llamado huachicoleo, con el llenado de los buques- tanque en el golfo de México, con un valor en el mercado de cien millones de dólares; que el Director de Infonavit tenía un sueldo de setecientos mil pesos mensuales; de los salarios y prestaciones excesivas de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; de como la Comisión Federal de Electricidad pasó de ser una empresa nacional que producía el 100% de los requerimientos del país, a producir sólo el 30 por ciento, para comprar el resto a los Estados Unidos; que algunas universidades no se quedaron atrás en su aventura por el camino de la corrupción y, desde luego los niveles de penetración de la corrupción en el sector público. Entre otras sorpresas.
Sólo que, cuando el Presidente abre la cloaca arriesga: su persona y su familia. Él lo sabe. Confiesa su miedo pero niega la cobardía.
Los mexicanos, congruentes con la conducta de un Presidente que sabe para qué es el ejercicio del poder, estamos obligados a actuar en consecuencia: primero en la defensa del mandatario; que sus enemigos y los delincuentes no lo vean solo y, segundo: mantener una actitud propositiva, no pasiva ni complaciente. Una actitud que nos lleve a la Refundación de México.
La actitud no excluye de ningún modo la crítica ni la manifestación de desacuerdos, sólo que, hacerlo con prudencia se constituye en obligación consciente.
No estoy de acuerdo con la forma de integración de la Guardia Nacional y lo digo y busco la forma que mi propuesta llegue a los oídos del Presidente por conducto del Sub Secretario Alejandro Encinas. Pero no ataco al mandatario. Simplemente estoy convencido de una guardia civil aprovechando a las policías estatales.
Me sorprende la actitud de los maestros de la Coordinadora CNTE, que se instalan en vías del ferrocarril en Michoacán. Se observa a un presidente desesperado, tanto que erróneamente acude a la Comisión Nacional de Derechos Humanos pidiendo opinión y, más que opinión en solicitud de ayuda, porque, “yo no voy a utilizar la fuerza de policía ni militar” lo dice.
La Comisión le da la respuesta evidente: “Cada quien cumpla con su obligación” (buena ayuda).
La prudencia, el ideal de la refundación, el anhelo de la cuarta República, la erradicación de la corrupción y el abatimiento de la delincuencia debieran motivar a los maestros de la coordinadora a jerarquizar principios y actitudes, a no hacer el juego a los intereses de los ex -presidentes del neoliberalismo. La Refundación es primordial.
“El caballero de la política” habla de Miguel Alonso
Triple erre Dominical de mi amigo Francisco Reynoso, en su edición de ayer, 10 de febrero, refiere el “podscat” de Esaú Hernández, “donde habla del PRI, la corrupción y Miguel Alonso”. La entrevista de Francisco Reynoso (Runrún) al ingeniero Hernández en formato “podscat”y que saldrá al público dentro de unos días, se perfila de gran interés para los zacatecanos.
Y, es que el ingeniero Esaú Hernández, además de tener como característica una formación ética-laica, que lo constituye en un personaje incorruptible, es también un conocedor a fondo de los temas que Reynoso anuncia: El PRI. Priista de toda la vida, fue presidente de su comité Estatal y es, a pesar de todos los peros, defensor a ultranza de su partido. La corrupción. Sus valores lo hacen despreciar todo acto de corrupción que, al parecer fue el motivo de su salida del gobierno Alonsista del que fue Secretario General. Miguel Alonso, a quien el ingeniero conoció, trató y fue enterado por versiones de primera mano, de las corruptelas del exgobernador.
Se antoja una entrevista de obligada recepción para todos los zacatecanos. Tiene mucho de que informarnos “el caballero de la política”, como le llaman sus compañeros de partido.
