- El amor es “algo muy perrón”; mi actual influencia es, “orgullosamente”, Los Temerarios, porque sus letras “atrapan”
- Este músico y cantautor nacido en Fresnillo y radicado en Ciudad Juárez ofreció hace unos días un recital en su lugar natal
- Actualmente promociona su videoclip Me acordé de ti, donde se sirve de elementos que se usaron años atrás, para crear un ambiente posmodernista
- “Me considero una persona old, vieja, pues siempre me ha gustado lo vintage”
- Mediante el género alternativo, expone también la influencia que ha recibido al leer a Carl Gustav Jung y Alejandro Jodorowsky, quienes “han cambiado mi percepción. La lectura abre muchísimos caminos”
- Los cuatro videoclips oficiales con que cuenta Elías han sido realizados en Novulo Studios, un proyecto que creó junto a su amigo Jair Vicente
- De niño, “me imaginaba en un escenario tocando. Fue como un sueño que después se me cumplió”
“Me considero una persona old, vieja, pues siempre me ha gustado lo vintage. Cualquier persona que escuche mi música nota el órgano, o el parecido, por ejemplo, a Los Pasteles Verdes, a música de antaño”.
Así lo sostuvo en entrevista exclusiva, durante su más reciente visita a Zacatecas, el joven Elías Rodríguez Solís, músico nacido en el municipio de Fresnillo pero criado desde la edad de un año en Ciudad Juárez, Chihuahua, quien actualmente promociona su videoclip Me acordé de ti, en el que incorpora elementos que se usaron en décadas pasadas, como un walkman, unos radios y un cassette, así como la simulación de interferencia de señal en las imágenes.
Elías abundó que con dichos objetos busca dar visualmente a sus piezas un toque de antaño, y señaló considerarse “muy posmodernista”, pues le gusta “integrar objetos que ya existieron y usarlos con otro significado; crear algo usando elementos de épocas pasadas, adaptándolos” a lo actual.
Ese propósito no se queda sólo en lo visual, sino que Elías también lo destina a la composición musical, de manera que sus piezas poseen sonidos que trasladan a otra época.
En ese tenor, este músico mencionó que el género que toca es “el que quiera la gente; no pienso enfrascarme en un género, ya que lo que hago son combinaciones drásticas de bossa nova, balada, rock, alternativo”, aunque “pienso que si tengo que ponerme un género, es el alternativo”.
Elías se introdujo desde niño en la música. Comenzó a prestarle atención en 2002, por influencia de sus hermanos, a la música que había en esa época, como Blink 182 y Simple Plan. Entonces, “me imaginaba en un escenario tocando. Fue como un sueño que después se me cumplió”.
Luego, comenzó a escuchar a Los Románticos de Zacatecas, Christopher Cross, The Beatles (cuya canción favorita es A day in the life) y, sobre todo, a John Lennon (cuya pieza predilecta es Oh my love). Asimismo, hace un año, fue gran seguidor de Soda Stereo, y tras ello, de Luis Alberto Spinetta, Charly García, The Cure y, acto seguido, de Enjambre. Sin embargo, su actual influencia es, “orgullosamente”, Los Temerarios, cuyas letras “atrapan”. También le gusta Los Dos Oros.
En este sentido, Elías compone su letra y su música en una permanente temática de amor, porque para él, el amor es “algo muy perrón”; incluso, lo aborda en la pieza intitulada Otra vez aquí, donde este joven habla de lo que siente por su ciudad natal.
El aprendizaje musical por parte de Elías no se originó en una escuela, aunque sí, en su afán de “ver qué sale”, siendo alumno de tres instructores de guitarra, de quienes transformó lo aprendido para ponerlo en práctica. Antes de tocar cualquier instrumento, escribía letras a la edad de 8 años, pero tomando como base una melodía ya conocida. Luego, fue tomando forma lo que hacía hasta lo que realiza ahora.
Pero Elías no sólo sabe tocar guitarra, sino que aprendió, de manera autodidacta, “por necesidad”, batería, bajo, teclado, entre otros instrumentos como violín, armónica y flauta transversal, además de canto.
Sin embargo, este joven cantautor dijo no ver lo que realiza como un proyecto, sino como “una necesidad de compartir creaciones, arte. Un proyecto es algo que planeas para que te brinde o te beneficie de algo. Lo que yo hago es compartir sentimientos y arte; decirle a la gente que no todo está perdido. ‘Yo vengo a ofrecer mi corazón’, como diría la canción de Fito Páez”.
Ese corazón lo ofrece, mientras tanto, mediante las entre 20 y 25 piezas grabadas que ya tiene en su haber, de las cuales cuatro ya cuentan con videoclip oficial y se trata de Mi árbol y yo, Tan lento y tan bonito como tú, Raro amor y Me acordé de ti, y acaba de realizar uno más, al que considera más un contenido audiovisual, denominado Parte femenina de la mente, el cual, debido a que se trata de una letra muy personal, con tomas también realizadas por él, con su lado femenino, creativo y sensible, sólo permanecerá por un tiempo en Internet. El estreno de este último, mismo que además es el primer videoclip que él dirige, lo realizó en el primer minuto del presente año.
Elías refirió que hizo un “intento de disco” en 2015, con guitarra y teclado, intitulado Solitario, el cual se integra de 11 piezas. El resto de las canciones grabadas son sencillos, pues “no me siento preparado” para grabarlas en otro disco.
Elías produce y graba para sí mismo en un estudio que todavía está en formación y que fundó junto con un amigo de él de nombre Jair Vicente. El nombre del proyecto es Novulo Studios, y en él trabajan desde 2015 Elías (como músico) y Jair (como productor y postproductor), aunque la idea nació hace varios años. Sin embargo, aunque todavía está en formación, ya han grabado a artistas de rap de Ciudad Juárez. La empresa se dedica a la producción musical, edición de video y fotografía, y diseño gráfico.
Así, todos los videoclips de Elías han sido producidos por Novulo Studios, incluido Me acordé de ti, acerca del que este músico comentó que la idea original era grabarlo en un campo abierto, pero al final fue hecho en un edificio abandonado de Ciudad Juárez.
En ese video, ideado por Elías y su productor, el personaje es una especie de extraterrestre que busca algo, y el color morado fue inspirado en el personaje Thanos, de los Avengers. En cuanto al equipo de músicos que lo acompaña, se trata de amigas de Elías que, aunque sí se dedican a la música, no son quienes ejecutan esta pieza; el propósito de que aparecieran allí fue para que se viera una banda tocando. En este sentido, cabe destacar que Elías es quien compone, toca y graba todos sus instrumentos; sólo ocupa a una banda cuando se presenta en vivo, y en este caso, también hizo la producción y la mezcla, mientras que la masterización la hizo Jair.
El pasado 4 de enero, Elías ofreció un concierto en el Club de la Una, en Fresnillo, donde se presentó únicamente con su guitarra y su voz, y leyó algunos poemas de su autoría. “A partir de ahora quiero tratar de hacer una especie de combinación de música, escultura, pintura; tratar de combinar todas estas disciplinas a la música. Mi objetivo simple y sencillamente es despertar conciencias” mediante el mensaje que mande con lo que hago.
Dos escritores han sido de gran influencia para las piezas de Elías; uno es Carl Gustav Jung, y el otro, Alejandro Jodorowsky. Ellos “me han cambiado la vida o, mejor dicho, mi percepción. Son autores que me han despertado un tercer ojo”. Dicho eso, agregó que “la lectura abre muchísimos caminos”, y recordando al escritor Hermann Hesse, quien en su novela El lobo estepario sostiene que “La mayor parte de los hombres no quiere nadar antes de saber”, Elías expuso que “el que no sabe nadar no quiere saber nada de agua, pero cuando ya sabe nadar, quiere cruzar el mar entero”, y así es, para él, la lectura.
