Autores: Mar Michelle Silva Rodríguez y Diego Uriel Rodríguez Maldonado
Residencia: Zacapu, Michoacán, México
Estaba mi amiga sentada en la cama
comiendo una caja de donas.
Llegó la Calaca y le dijo no comas
o vas a quedar como vaca.
Llego su papá a la casa,
y viendo que ya no estaba,
se puso de rodillas a llorar,
diciendo ¿dónde está mi hija Rosa?
Cuando la Calaca volvió al hogar
vio al papa, y con una voz de miedo
le dijo sigues tú, te voy a matar
y de un jalón se lo llevó pa’l cielo.
Cuando vio a Rosa en el cielo
se puso más frío que el hielo
y exclamó ¡Por fin te veo!
Vámonos a la casa que lo deseo.