Vivir en el pasado es cerrarse al cambio

A penas terminó el proceso electoral 2018 y muchos ya comenzaron la carrera por la gubernatura para el 2021, otros más esperan los tiempos que consideren perfectos para poder levantar la mano y otros hacen lo posible para proyectarse desde cualquier encargo para el que fueron electos o propuestos, sin embargo, probablemente la mayoría de ellos no ha considerado qué es lo que los zacatecanos buscaremos en un candidato para el 21, no considerarlo sería como ir a la guerra sin fusil o a ciegas.
El voto de los zacatecanos hasta el pasado proceso electoral fue variable, los resultados lo demuestran, el efecto Andrés Manuel no obtuvo el mismo resultado en nuestro estado como en otros en los que la gran mayoría de candidatos obtuvo la victoria sobre sus contrincantes, morena logró mayoría en en congreso federal y en el Senado, en el congreso de Zacatecas apenas y se logró sumar un diputado a la cantidad obtenida en la 62 legislatura, pocos fueron los distritos que se lograron y apenas se alcanzaron a sumar algunas cuantas presidencias municipales a las dos obtenidas el pasado proceso electoral, esto nos arroja un dato interesante ¿los zacatecanos han sido conscientes de los candidatos que les presentó morena en el estado y decidieron realizar voto cruzado? de ser así algunos de los que ya han levantado la mano deberán ser conscientes de que no representan la mejor opción para verse beneficiados por el voto de los ciudadanos, pues el efecto morena no servirá de mucho si el candidato no es bien visto por los zacatecanos.
Por otra parte, el Acción Nacional de Zacatecas al igual que el PRI y el PRD, deberán buscar frescura en sus candidaturas, algunos de sus cuadros políticos más fuertes, fueron arrasados en las urnas, pues solo un candidato federal del partido Verde logró alzarse con la victoria con apenas casi dos mil votos, los otros tres distritos fueron para morena, estos al haber sido los mejores candidatos que tenían entre sus filas y al verse derrotados tan aplastantemente en las urnas, hablando políticamente, han sido acabados en cuanto a intenciones de futuras candidaturas, algunos de ellos sin cargo alguno difícilmente lograrán permanecer en el ámbito público.
El escenario político para el 2021 no será fácil para ningún aspirante, la falta de perfiles y la escasa formación política de los pocos existentes, pondrá en apuros a cualquier candidato, recordemos que también se renovarán el congreso federal con 4 candidatos, el congreso local con sus 18 distritos locales y además los 58 municipios del estado, encontrar buenos perfiles para lograr el empuje de los mismos a la candidatura estatal será lo que más deba preocupar a quienes tengan la aspiración, pues no hay ningún aspirante hasta el momento que pueda lograr generar el efecto que logró López Obrador sobre los demás candidatos.
Algunos de los aspirantes ya han alzado la mano, muchos de ellos implementan estrategias de comunicación para posicionarse como un movimiento único y poderoso, la generación de expectativa logra impactar en algunos cuantos despistados y el interés personal logra jalar a otros pocos, sin embargo, la figura principal de un movimiento no puede ser basada en un personaje que gobernó hace ya varias generaciones de gobernadores, las condiciones del Estado nunca volverán a ser las mismas que las de aquellos años, la sociedad ha cambiado, las condiciones políticas también y de igual forma la situación económica, aunado a ello, como en todas las familias ningún parentesco te hace igual que los demás miembros, como en todos los grupos políticos ningún miembro del mismo son iguales, la coincidencia con intereses es otra cosa.
Buscar posicionar personajes basándose en una estrategia que trate de vincularlos ya sea con los hermanos, con los padres, con los tíos o abuelos, como ya se ha demostrado en otros procesos anteriores, no servirá de mucho, las generaciones que voten en el 2021 ya no tienen empatía con aquellos personajes, no los conocen, por ende desconocen las acciones que pudieron haber realizado en aquellos años. Es así que vivir estancados en el pasado es cerrarse al cambio político en el Estado, es cerrarse ante la oportunidad de arrojar una nueva clase política en Zacatecas, es cerrarle la puerta al relevo generacional, ha llegado el momento de que los institutos políticos permitan la democratización de sus procesos internos, ha llegado el momento de que la militancia de los mismos le cierre el paso al cacicazgo, al compadrazgo y a la política de oportunistas que ha llevado al estado y a nuestros municipios a un estado crítico en las finanzas de los mismos. Los próximos candidatos deberán contar con el respaldo de sus militantes, de no lograrlo difícilmente podrán lograr el de la ciudadanía en general.