Trato injusto que recibe Zacatecas de gobierno federal: FONE Y UAZ

El estado de Zacatecas tiene los problemas educativos que padece el resto del país, como el caso del multicitado problema de la calidad del servicio, coberturas en forma de pirámide y deficiencias en la formación de profesores. Sin embargo, Zacatecas tiene una particularidad: en el paso de FAEB a FONE, entre los años 2014 al 2015, el estado sufrió una fuerte descompensación en el financiamiento de su nómina educativa. El FONE re-centraliza la autorización de la nómina y separa los docentes que son responsabilidad de la federación de aquellos que quedan bajo la obligación financiera del estado. En ese tránsito, la federación se desentendió (no reconoció) una cantidad importante de profesores (aproximadamente 900), los que ahora son causa de déficit financiero en la entidad. Se atribuye esa descompensación a errores del gobierno de Miguel Alonso. Pero ahora es un hecho, y debe resolverse.
El FONE cubre 35 500 plazas y cuestan poco más de 4 mil millones de pesos. Pero se arrastra un déficit que rebasa los 2 mil millones de pesos. La inmensa mayoría de los estados de la república no tienen ese déficit porque cuentan con el reconocimiento suficiente de plazas. El caso de Zacatecas es de los pocos que padece ese problema. Mientras sigamos arrastrando ese boquete financiero no hay posibilidades reales de emprender una estrategia seria que luche por la calidad educativa. Es imprescindible que la federación asuma las 900 plazas docentes que dejó fuera de su nómina. Cuando existía el FAEB, el estado tenía la posibilidad de manejar el recurso, de tal manera que hacían sinergias de gasto que ahora es imposible. Por ejemplo, personal administrativo que atendía el subsistema estatal, sobre todo telesecundarias, era pagado con ese recurso. Ahora, con la recentralización no es posible. En los últimos años se dio marcha atrás al federalismo en todos los sectores: educación, salud o campo. Gobierno federal tomó el control de los programas y el gasto correspondiente. La pregunta al nuevo gobierno es: ¿van a retomar la ruta del federalismo o continuarán el camino del centralismo autoritario? Y una pregunta esencial: ¿rescatarán la educación básica del estado de este pasivo pantanoso en que nos metió el gobierno que está por irse?
Otro problema esencial que el gobierno federal debe atender es la crisis financiera de la UAZ. De forma parecida a educación básica, se pone de relieve un trato desigual e injusto a nuestro estado, respecto al trato en el financiamiento de la educación. Lo de la UAZ ya lo hemos explicado: una institución con los menores costos por alumno y crecimiento de sus indicadores de calidad, y sin embargo, recibe mucho menos de lo que reciben otras universidades con características similares.
En suma, lo que tienen en común los dos problemas de financiamiento de la educación que hemos mencionado, es el trato injusto que recibe Zacatecas del gobierno federal. Por ello, esta entidad espera que con la llegada del nuevo gobierno esa realidad pueda cambiar. Lo que se traduciría, en concreto, en dos medidas precisas: ajustar el reconocimiento de plantillas en el FONE y solventar el pasivo de la UAZ. Así de clara y precisa es la demanda.